El Jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta y su alfil en educación Soledad Acuña tuvieron que dar marcha atrás en el intento de cierre de las escuelas nocturnas, frente a la resistencia llevada a cabo por las y los docentes organizados sindicalmente, los estudiantes afectados, las familias de estos estudiantes y por toda la comunidad que fue haciendo propia una lucha que, de fondo, es por el derecho a la educación.