Los trabajadores de la Argentina lamentamos este duro golpe al pueblo brasileño y a la Democracia, ya que en el día de hoy la hermana República Federativa del Brasil ha sufrido un golpe de Estado parlamentario. Consideramos que esta destitución revela un claro desprecio al estado democrático de derecho.
Todo el proceso estuvo plagado de irregularidades y sin evidencias que justificaran el juicio político y posterior desplazamiento de la Presidenta legal y legítima del Gobierno de Brasil, Dilma Rousseff, quien fue electa con el 51,62% a finales de 2014 y con mandato hasta el 2019.
Reconocemos, y así lo hemos denunciado en reiteradas oportunidades, que este juicio político no tuvo bases fundadas; radicó exclusivamente en el accionar de la oposición política, la exacerbación de los medios de comunicación masivos y el interés de algunos sectores del poder judicial brasileño que buscaron la desinformación, el odio contra el gobierno y la polarización ciudadana. El resultado es un juicio político sin crimen, lo cual no tiene otro nombre que golpe de estado parlamentario.
Los pueblos de toda América Latina seguiremos luchando por el respeto a la democracia, el Estado de derecho, la integración, la soberanía y la fraternidad regional.