Una multitud acompañó a las Madres este jueves en que se conmemoraron 2000 marchas en reclamo de Memoria, Verdad y Justicia. La CTA estuvo presente y vivió con emoción y alegría el reconocimiento del compañero Edgardo Depetri, que recibió de manos de Hebe el pañuelo de las Madres, símbolo de lucha y resistencia, por su importante labor como diputado nacional, dirigente social y sindical y representante de los trabajadores.
La Pirámide de Mayo estaba adornada con numerosos pañuelos en los cuales muchos de los presentes fueron escribiendo mensajes de apoyo y agradecimiento hacia las Madres: “Abrazo militante por todos estos años de lucha”, “La dignidad encarnada”, “Valentía, compromiso y amor”, entre otros, que hacían referencia a las 2000 marchas y a la persecución político judicial que está sufriendo la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.
Durante la jornada y luego de su tradicional marcha, las Madres realizaron un “juicio relámpago, ético y político”, contra el presidente Mauricio Macri, la vicepresidenta Gabriela Michetti, el ministro de Hacienda y Finanzas Alfonso Prat-Gay, el ministro de Justicia y Derechos Humanos Germán Garavano, el ministro de Energía Juan José Aranguren y el ministro de Salud Jorge Lemus.
Abrazaron a las Madres numerosas organizaciones de derechos humanos, sociales, políticas y sindicales, entre ellas CTA Nacional y CTA provincia de Buenos Aires, Suteba, UTE-Ctera, AGTSyP, ATE Capital, la Asociación Argentina de Actores, el Comité por la Libertad de Milagro Sala, la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), H.I.J.O.S., Kolina, La Cámpora, Nuevo Encuentro, Movimiento Proyecto Popular, entre otras.
Desde el escenario, adornado con un corazón rojo gigante de goma espuma y un pañuelo de las Madres con una estructura de alambre para darle forma, y muchos simbolitos de pañuelos con los centenarios de las marchas impresos, hasta llegar a la 2000 en el centro, los oradores dirigieron algunas palabras a los presentes. “Pensamos mucho a quién darle el pañuelo. Hasta ahora no nos hemos equivocado”, manifestó Hebe y agregó: “Nunca se lo hemos dado a un trabajador y buscamos uno comprometido, serio, honesto, entregado y dijimos: Depetri. Y acá está, en los 2000 jueves. Es también uno de nuestros hijos porque él tomó las banderas de nuestros hijos y las levantó muy alto, porque el 54 % de los desaparecidos son trabajadores y Depetri los representa”.
Notablemente emocionado, el compañero Edgardo Depetri, esbozó: "No puedo explicar con palabras lo que siento pero sí quiero decir que no lo recibo tan solo por mí. Soy parte de los miles y miles de luchadores populares del movimiento obrero que le dicen no a las políticas de ajuste del macrismo. Esta Plaza de hoy es la respuesta del pueblo de nuestra patria a la brutal campaña de estigmatización del gobierno de los ricos, del gobierno de los grupos económicos y del poder concentrado; es la respuesta que le dice a Macri que las Madres de Plaza de Mayo viven en el corazón y en la memoria de todo el pueblo argentino”.
Intervención completa del compañero Edgardo Depetri:
"No puedo explicar con palabras lo que siento pero sí quiero decir que no lo recibo tan solo por mí. Soy parte de los miles y miles de luchadores populares del movimiento obrero que le dicen no a las políticas de ajuste del macrismo. Esta Plaza de hoy es la respuesta del pueblo de nuestra patria a la brutal campaña de estigmatización del gobierno de los ricos, del gobierno de los grupos económicos y del poder concentrado; es la respuesta que le dice a Macri que las Madres de Plaza de Mayo viven en el corazón y en la memoria de todo el pueblo argentino.
No puedo dejar de sentir que también recibo este pañuelo en nombre de la compañera Milagro Sala, presa política del gobierno de Mauricio Macri, como no puedo dejar de sentir que este pañuelo lo recibo en nombre de mi querido compañero y amigo Néstor Kirchner y de nuestra conducción de nuestra compañera que por primera vez, se podrá discutir mucho nuestro gobierno y está bien que se lo discuta como se discuten los grandes gobiernos que tuvo esta patria de América latina, como se discutió a Perón, a los gobiernos nuestros populares y revolucionarios como el de Evo Morales, como el de Chávez, como el querido gobierno de Fidel. Esta bien que se discuta porque se van a discutir nuestros gobiernos por los próximos cien años. Este gobierno pasará a la historia, tan solo quedará en el corazón de las clases dominantes, de los ricos de este país, de los que han hecho los golpes militares y han construido los peores tiempos de la política argentina. Por eso también lo recibo con orgullo y con alegría en nombre de nuestra querida compañera Cristina Fernández de Kirchner.
Compañeras y compañeros, para terminar yo siempre les digo a mis compañeros militantes del movimiento obrero, a mis queridos compañeros de ATE allá en Río Turbio, a los compañeros de las centrales obreras, siempre les digo, siempre les planteo ’hay que analizar bien el fenómeno Madres de Plaza de Mayo’. Hay que estudiarlo, hay que sentirlo, hay que vivirlo, hay que comprenderlo, sobre todo en estos momentos que vivimos porque Madres de Plaza de Mayo, con la marcha reclamando por la aparición con vida de nuestros hijos, reclamando y denunciando la dictadura militar, empezaron a abrirnos los ojos y a abrir el camino para decirnos con fuerza en esta Plaza y en todas las plazas que acá no hubo ’guerra’ ni ’guerra sucia’. Hubo Terrorismo de Estado. Hubo aniquilamiento de nuestros compañeros y lo hicieron con un objetivo, aniquilaron nuestros compañeros, sus hijos de nuestros hijos, los aniquilaron para empezar a cambiar el país y la sociedad. Terminaron con el golpe, con aquel país de Perón y Eva Perón y del 17 de Octubre del 45, terminaron con el país industrial, de pleno empleo, de buenos salarios; porque si hay salarios buenos hay más consumo, si hay más consumo hay más producción y si hay más producción hay más horas de trabajo. Aniquilaron el Estado de Bienestar, aquel que garantizaba la salud, la educación, el sistema previsional, la felicidad para la mayoría del pueblo argentino. Ahí empezó, en ese golpe militar del 76 empezaron los peores tiempos y momentos de la patria.
Por eso viven con nosotros y son guía que nos llevará de nuevo a la victoria, las Madres de Plaza de Mayo, los 30.000 compañeros desaparecidos.
Por eso compañeros, cuando venimos a defender a las Madres lo hacemos en defensa propia, lo hacemos por nosotros mismos. Porque las Madres durante la dictadura fueron un faro que iluminó la resistencia. Y en los mejores momentos de los gobiernos populares de Néstor y Cristina son la esperanza, el símbolo que nos guiará para volver de nuevo a la victoria de la mano de Cristina, de la mano del pueblo y de la mano de los 30.000 compañeros desaparecidos.
¡Fuerza compañeros!
¡Fuerza Madres!
¡Fuerza Hebe!
¡Ustedes viven en el corazón de nuestro pueblo argentino!
¡Muchas gracias!”.