Desde la Secretaría de Igualdad de Género de la CTA queremos manifestar nuestra enorme preocupación por una serie de hechos de intimidación.

Desde la Secretaría de Igualdad de Género de la CTA queremos manifestar nuestra enorme preocupación por una serie de hechos de intimidación, falsas denuncias y amenazas sobre organizaciones y activistas que promueven los derechos humanos de las mujeres, el debate por el derecho al aborto y el acceso a la información de aborto seguro.

Queremos expresar nuestra solidaridad y apoyo al Centro de Estudiantes del colegio Carlos Pellegrini de Buenos Aires, que organizó una charla sobre el tema del aborto. Estas temáticas se inscriben en el marco de lo establecido por la Ley de Educación Sexual Integral y sus contenidos curriculares, que tienen una premisa básica que es el derecho a la información. Las y los jóvenes todo el tiempo están expuestos a discursos, contenidos y mensajes sobre sexo, sexualidad, contenidos eróticos e incluso pornográficos, pero parece que los alertas surgen cuando estos temas se tratan desde el paradigma de los derechos y con contenidos científicos, como son los desarrollados desde la Organización Mundial de la Salud, donde pueden encontrarse los datos de los graves efectos de la ilegalidad del aborto en América Latina y las diversas formas de acceso a los abortos seguros, como el caso de las pastillas de misoprostol. Nos alarma que esta situación haya provocado la apertura de un sumario, que esperamos sea inmediatamente cerrado en favor de seguir apoyando las iniciativas de jóvenes estudiantes que se involucran en acciones colectivas y promueven espacios de formación y debate.

La verdad es que esta supuesta denuncia, de algo que no es un delito, se inscribe no en el contenido de la charla, sino en el intento de atacar a un grupo por su identidad política. Hacemos responsable al diario Clarín como promotor de esta operación mediática, que está inscripta en su autodefinición de “periodismo de guerra”, que incluso en temas como este, no duda en cambiar su histórica línea editorial, más favorable a los derechos personalísimos, por las posiciones de un periodismo ultra conservador y amarillista. La acción política del espacio de género del partido Nuevo Encuentro es conocida por todas nosotras y es de enorme contribución en pos de los derechos de las mujeres y la diversidad, tal como lo hacen tantas otras organizaciones de diverso signo político o social. Llamamos la atención sobre este accionar de la prensa hegemónica direccionadas contra fuerzas políticas en una clara persecución ideológica, que recae no casualmente sobre organizaciones que han sufrido también ataques de destrucción de sus locales partidarios e incluso con armas de fuego. Como puede leerse en las redes el hostigamiento a la referente de ese espacio Emelina Alonso, con quién también nos solidarizamos.

No es ajeno a este clima criminalizador de las líderes sociales y populares las amenazas que han sufrido diversas compañeras del colectivo de Socorristas en Red-feministas que abortamos. Por esta razón también hacemos llegar todo nuestro apoyo a la colectiva feminista Las Revueltas de Neuquén y las compañeras de la Red de Socorristas de Córdoba, que han sufrido amenazas y operaciones de prensa, orientadas a deslegitimar su acción en favor de los derechos de las mujeres y del derecho a la información de mujeres en situación de aborto. Tal como ellas señalan, es una acción por la vida y la libertad de las mujeres. Seguimos planteando la imperiosa necesidad del aborto legal, seguro y gratuito, tal como propone la Campaña Nacional de la que formamos parte.

Estela Díaz, CTA Nacional
Laura Sotelo, ATE Capital
Karina Nicoletta, Subte
Mónica Ingravidi, Foetra
Romina Pereyra, CTA Matanza
Cristina Echegoyen, Suteba
Florencia Losio, Sitraju Nacional
Carolina Brandariz, UTE

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