Desde el Sindicato de Conductores de la República Argentina expresamos nuestro máximo repudio y solidaridad con el compañero Santiago Menconi, trabajador de la línea 60, víctima del espionaje ilegal realizado por la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), en la gestión del macrismo para tratar de debilitar al movimiento obrero. Las operaciones de inteligencia a ciudadanos trabajadores y dirigentes políticos están prohibidas por ley y constituyen un grave atropello a la integridad personal.