Las maestras y maestros villeros y de los barrios populares organizados queremos destacar y agradecer el acompañamiento de nuestros dirigentes el pasado viernes 1ero en la Villa 21-24.
Allí, junto a referentes de otras organizaciones, sindicatos y referentes de la lucha por los derechos humanos Hugo Yasky, Roberto Baradel y Eduardo López estuvieron presentes para apoyar y resguardar a las familias de dos jóvenes militantes de La Poderosa que muy valientemente llevaron a juicio a 6 prefectos.
Nosotros, maestros y maestras villeras, hace tiempo venimos denunciando con gran preocupación el incremento del abuso de las fuerzas de seguridad en nuestros barrios: cómo estigmatizan a nuestros pibes, los violentan y, en los casos más extremos los asesinan.
Nosotros, maestras y maestros villeros sabemos que el único uniforme que garantiza la seguridad en los barrios es el guardapolvo blanco. Por eso, con mucha alegría recibimos a nuestros dirigentes, los mismos que en los 90 lucharon en la carpa blanca, estuvieron con a nosotros, maestras y maestros villeros, junto al barrio, en donde hay que estar; mostrando que la organización y unidad es el camino para combatir las políticas neoliberales de este gobierno del ajuste, el hambre y la represión.
Como quedó demostrado este último viernes, las maestras y maestros villeros sabemos que la lucha colectiva fortalece los vínculos, profundiza la solidaridad y hace posible lo que muchos creen imposible.
Control popular de las fuerzas de seguridad.