La crisis económica avanza hacia una catástrofe social. Los humildes no pensamos pagar la fiesta de las corporaciones, el gobierno y el FMI.
¡BASTA DE AJUSTE!
La Argentina vive momentos difíciles. El Gobierno se enfrenta a las consecuencias de un programa económico que consciente y deliberadamente nos ha empujado a una catástrofe económica, cuyas consecuencias sociales amenazan la vida cotidiana de los mas humildes. No estamos en presencia de errores o desaciertos en la gestión económica, estamos en presencia del resultado de la implementación de políticas económicas que han materializado una brutal transferencia de ingresos desde el bolsillo de los trabajadores y los mas humildes a los balances de un puñado de grandes grupos económicos.
Mientras las noticias muestran como parte de un show la escalada del dólar, mientras encuentran sus explicaciones recogiendo las demandas de la banda de especuladores que está saqueando la Argentina, mientras en las redes sociales se humoriza y se especula graciosamente sobre la situación, en las barriadas populares la situación económica se agrava como una auténtica tragedia.
Cada centavo que el dólar devalúa nuestra moneda, los precios en las barriadas se disparan haciendo cada día mas imposible el consumo popular. Nuestros comedores y merenderos explotan de gente que no puede comer en sus casas, el invierno ameanza la salud de las pibas y los pibes y los precios de las garrafas y los servicios públicos es impagable.
Con cada centavo que el dólar aumenta, nuestras compañeras y compañeros beneficiaros de los planes sociales que inventó éste gobierno para destrozar las políticas públicas de empleo, tienen un peso menos en el bolsillo. Un beneficiario del Salario Social Complementario cobra hoy 140 dólares por mes, y amenaza con seguir bajando.
Cada maniobra de especulación sobre el dólar encuentra como respuesta del Gobierno seguir rifando las divisas del Banco Central. En apenas 72 horas, el Gobierno entregó a los especuladores y financió la fuga de divisas al extranjero en un equivalente del presupuesto anual de 1.000.000 de Salarios Social Complementarios.
La comida no tiene precio en los barrios populares, los comercios cierran, las grandes cadenas especulan con el desabastecimiento y los servicios se disparan por la locura de atar el valor que pagamos en Argentina al precio del dólar.
Insistimos: no son errores, es la tragedia cotidiana a la que nos empujó el Gobierno. La miseria es culpa de los hombres miserables.
Durante estas horas el equipo económico diseña la profundización del ajuste. El Gobierno vuelve de rodillas a pedirle al FMI que siga trazando exigencias que traerán mas sufrimiento para los humildes. Ya no le pedimos que cambien el rumbo, porque es el que deliberadamente asumieron. Les pedimos que no empujen a los más humildes hacia la CATÁSTROFE SOCIAL de no encontrar respuestas en un presupuesto que si no incrementa sus políticas sociales, nos empuja hacia una auténtica TRAGEDIA POLÍTICA.
Las organizaciones populares seguiremos en la calle, construyendo unidad y organización para frenar las políticas de ajuste.
SI HAY MISERIA, QUE SE NOTE.
Frente Trabajo y Dignidad Milagro Sala
CTA Frente Barrial
CTA Autónoma
CNCT Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo