Discurso del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, durante el cierre del plenario de la militancia en la Universidad Tecnológica Nacional de Avellaneda.

Hoy decían que este 11 de marzo es uno de los días más calurosos en los últimos 120 años. Hoy acá en Avellaneda, en este Luche y Vuelve, estamos dándole más calor más caluroso, que es el calor de la militancia, de las compañeras y compañeros de las organizaciones.

Hoy se conmemora también un 11 de marzo de hace 50 años, un 11 de marzo donde se rompió, después de 18 años de proscripción, persecución, exilio, fusilamientos, absoluta guerra contra el peronismo organizado, se rompió la proscripción que pesaba sobre el peronismo.
Pero esos 18 años, donde prohibieron a Perón, pero prohibieron también mencionar los nombres de Perón y Evita saben ustedes que esta acción generó una reacción. Fueron 18 años de lucha y resistencia de nuestro pueblo. Pero también durante esos 18 años, donde Perón, donde el partido estaba prohibido, donde pesaba la proscripción, hubo algunos vivos que pensaron que podían hacer un peronismo sin Perón. No se podía, como hoy no se puede hacer un peronismo sin Cristina.

Ayer de nuevo pudimos escuchar las palabras de Cristina en Río Negro. Cristina empezó a enumerar una cronología de lo que fue el año pasado. Un año preparatorio de lo que es la campaña electoral, que tienen diseñada para este año, un año absolutamente preparado como lo hicieron durante el año 15, como lo volvieron a hacer durante el año 19 y nos dijo Cristina que han pasado tantas cosas tan graves y tan vertiginosas que uno ya pierde la cuenta.
Nos dijo Cristina, que, en el mes de marzo del año pasado, y lo recuerdo, porque ahí estuvimos un rato en el despacho que apedrearon, que le pasó una piedra a centímetros de la cabeza, y de nuevo orquestado y preparado.

Quiero reconstruir un poco esa cronología que comentó Cristina. En el mes de mayo sin que lo supiéramos, ninguno de nosotros, se comenzaron a formar diversos grupos como si fueran espontáneos, de esos copitos, de Revolución Federal, se empezaron a conformar estos grupos como si fueran espontáneos, porque a veces uno siente que, con la vorágine de las noticias, quieren que nos olvidemos o nos tratan de estúpidos.
Esos grupitos, uno de ellos con una carpintería, no sé, en Boulogne, que no tenía ni cartel, le vendía muebles por 20 millones de pesos a la familia de Toto Caputto,
¿Qué se creen, que pueden engañar toda la vida y todo el tiempo? ¿Y saben dónde funcionaba esa carpintería? En lo que había sido un comedor, donde había estado Macri.
Uno puede hacer fuerza para creer en las casualidades, en el azar, pero Cristina nos ha enseñado que todo tiene que ver con todo. Nosotros exigimos que haya castigo para los que atentaron contra la vida de Cristina. Para los que lo prepararon y para los que los financiaron.

En el mes de junio, poco después, empezaron algunos de los economistas de Macri, Lacunza, Laspina, empezaron a dar entrevistas, a publicar twits, y a decir que la deuda en pesos que estaba emitiendo nuestro gobierno no la iban a pagar. Empezaron esto en el mes de junio. Llama la atención porque esta misma maniobra la han repetido hace unos pocos días. Empezaron a decir que ellos no iban a respetar los títulos de deuda que emitiera este gobierno. A mí me hace acordar cuando estábamos en el 2015, disputando y discutiendo con los fondos buitres, como algunos se iban a Nueva York a decirles que les iban a pagar todo. Aquella vez y esta vez, que lo sepan bien, no le van a torcer el brazo a un gobierno popular. Pueden conspirar, hacer terrorismo económico.

En julio vino la renuncia del que entonces era ministro, Martín Guzmán. Y quiero convocar la memoria de todos y todas. Esos días parecía que armaban el clima de que el gobierno se caía y no terminaba. Digo porque atentaron grupitos violentos, twits, diciendo que la economía se cae. Corridas. Eso se armó durante todo el año pasado.

Y en agosto, en ese mismo cronograma, estos fiscales que jugaban al fútbol en la quinta de Macri, hicieron un show televisivo vergonzoso, leyendo un alegato plagado de mentiras e inconsistencias, y eso sí, zócalos y títulos para los canales de televisión porteños y macristas.

Eso es agosto y en septiembre, en el mismo cronograma, después de haber provocado 20 mil hechos de violencia, (recuerdo cuando asumía Massa como ministro, también, pegándole a los autos, amenazando de muerte, con guillotinas, bolsas mortuorias), armaron un clima donde parecía que había odio instalado en la sociedad y eso desemboca en el atentado contra la compañera Cristina. Todo parte de un año electoral.

Luego, en diciembre, además de sacar el fallo contra Cristina, ya por el Tribunal, que conocimos ayer en sus fundamentos, creo que nunca estuvo peor usada la palabra fundamento. Lo que ocurrió fue una vergüenza, un ridículo, una calamidad de ese partido judicial. No sé quién tuvo oportunidad de ver ese fallo, pero como bien decía el abogado de Cristina, ni siquiera en el fallo pudieron sostener ningún de esos argumentos que habían presentado los fiscales. Parecía otro juicio, con otros argumentos, que en realidad eran puro humo.

Y sigo el relato, este mes de diciembre también, el 21, la Corte Suprema votó jueces que aceptaron ser nombrados por decreto por Macri contra nuestra Constitución, nuestras leyes, violando todas las premisas de nuestro sistema republicano que tanto les gusta mencionar. Esos jueces se manotearon los recursos, no de nuestra provincia, sino de toda la Argentina, a través de un fallo de nuevo mentiroso, vergonzoso e ilegal.

Hay que decir que resistimos, muchos de los que estamos acá, intendentes e intendentas de la provincia, diputadas, diputados, senadoras, senadores, sépanlo bien, ese fallo fue repudiado por todas las provincias argentinas. Es un fallo que busca acumular más riqueza y poder en una sola ciudad contra toda la República Argentina. Menciono esto porque es la cronología, porque uno tiende a olvidarse, porque fueron tantas cosas y de tanta gravedad, forma parte de la campaña que tienen diseñada.

Es así, y en ese camino quiero mencionar solo dos cuestiones: en primer lugar, que a diferencia de otras veces, con campañas parecidas, se conocieron los chats, los diálogos, entre fiscales, jueces, el ministro de Seguridad que todavía sigue en su cargo aunque suspendido, entre espías y dueños o ceos de Clarín y de los medios de comunicación. Conocimos cómo se arman estas cosas detrás de bambalinas. Conocimos la obscenidad que tienen para digitar los piolines de lo que ellos dicen que son fallos o sentencias judiciales.

Miren, compañeras y compañeros, nos han dado un instrumento poderosísimo. Conocimos la trastienda y la preparación de cada una de esas maniobras. Ahora, compañeras, compañeros, es nuestra obligación que todo el pueblo sepa cómo se manejan. Que todo el pueblo sepa que Clarín, La Nación, una parte de la justicia, los servicios de inteligencia, son una banda mafiosa que buscan proscribir y prohibir a la dirigente del campo popular.

Pero hubo otra cosa sobre la que quiero llamar la atención, que también ocurrió el año pasado.
Tal vez engolosinados, tal vez ilusionados con que el gobierno terminaba antes, porque eso decían en todos los canales y en todos lados, tal vez por eso hicieron algo que hasta ahora no habían hecho, desclasificaron, exhibieron su programa económico. Dijeron lo que planean y lo que quieren hacer en la Argentina, y empezaron a hablar sin tapujos, a diferencia de la elección pasada, de que vienen a achicar el Estado, vienen a privatizar Aerolíneas, YPF. En fin, vienen a quitarle los derechos al pueblo argentino.

Compañeros y compañeras, esta vez nadie puede hacerse el distraído, nadie puede comerse los globitos de colores, nadie puede comerse la revolución de la alegría, nadie puede creerse podemos vivir mejor, no hay mejora, no es así, ya han dicho lo que vienen a dejar los derechos, que podemos vivir mejor. No es así. Ya han dicho lo que vienen a hacer con nuestro pueblo, con la salud, la educación, y además porque los vemos desfilando por los canales de televisión, o a veces ni eso. Tienen montones de candidatos para ahorrarse los movileros.

Andan recorriendo la provincia haciendo en consonancia, con cada una de esas denuncias falsas y enormes mentiras, recorriendo la provincia entera. Pero hay que recordarle también a nuestro pueblo que gobernaron hace tres años.

Cuando nos dicen que falta. Por supuesto que falta, por supuesto que en la provincia de Buenos Aires falta infraestructura, salud, educación. ¿Pero saben qué? Cuando estuvieron ellos rompieron todo, cuando estuvieron ellos abandonaron la salud, la educación. Persiguieron docentes, explotaban las escuelas. ¿Desde dónde hablan?

Tenemos este instrumento que no teníamos antes. No van a aparecer en los canales macristas diciendo esto. Pero sabemos cómo arman y pergeñan estas movidas de persecución judicial. Sabemos lo que van a hacer si ganan. Sabemos lo que hicieron cuando gobernaron, compañeros y compañeras, aunque lo escondan, aunque se disfracen.
Es nuestra obligación como militantes recorrer todas las escuelas, las fábricas, los barrios, la calle, los clubes y explicar, lo dijo Cristina. Hay que bajar al territorio, hay que dar la discusión sin vergüenza, sin esconderse, porque no tenemos nada que esconder. Mirando a los ojos a nuestro pueblo.

Por eso, compañeras y compañeros, tal vez porque hasta ellos publican las encuestas y lo que le dan las encuestas todos los días no lo pueden ocultar.
Han inventado un fallo, una condena, miles de causas. Han estado mintiendo, ensuciando y embarrando.

Pero no pueden, la compañera Cristina Fernández de Kirchner, es la dirigenta en la que nuestro pueblo cree, en la que confía, y la que nuestro pueblo quiere.
Por eso, como ya no les alcanza con mentir y embarrar, ahora dieron un paso más que es el de la proscripción. Decía que nos toman por idiotas y quieren tomar a todos por tontos.
Estuvieron años y años inventando causas, juicios, y cuando logran una condena, como lograron ahora, cuando logran publicitar, como si fuera el resultado de un juicio justo, que Cristina es culpable de algo, sin ninguna prueba, a través de los chats de Lago Escondido armaron todo, son tan cobardes, que ahora tiran la piedra y esconden la mano.

Quisieron durante años proscribir a Cristina y ahora parece que nosotros tenemos que explicar lo que ellos mismos hicieron. La proscripción de Cristina es un trabajo en el que vienen empeñándose hace muchísimo tiempo. No nos dejemos engañar. No nos enredemos en falsos debates. No les alcanzó con ensuciar. Ahora tienen el instrumento que creen les va a servir para proscribir a la compañera.

Escuchábamos a Cristina en Río Negro. Tenemos muchísimo para decir de los 12 años y medio de Néstor y Cristina, pero voy a hablar de algunos títulos y temas que puso Cristina, y lo voy a decir porque esos son los ejes del debate, esos son los puntos que hay que discutir de cara a una elección y de cara al futuro. Nos dijo que queda demostrado por enésima vez que esa teoría del derrame no existe y no existió nunca. Que la economía puede crecer, que la actividad, el empleo puede ser mayor, pero lo importante es que ese crecimiento, que los frutos de nuestro desarrollo no se queden en las manos de un sector absolutamente minoritario. Es importante discutir, cómo, cuándo, se toman las medidas que hay que tomar para que el crecimiento sea con distribución, con igualdad, con inclusión social.

No lo hemos fundamentado conceptualmente. Lo hemos visto 12 años y medio. Si el crecimiento no viene con inclusión social, con distribución del ingreso y con mejora de los salarios no se puede sostener. No es sólo que es injusto, además es insostenible. Es necesario fomentar el mercado interno, el consumo, la industria nacional. Es necesario que los trabajadores y las trabajadoras, tengan capacidad de ingreso, porque sino depende de factores externos como estamos viendo, una sequía o la exportación.

Ha dicho Cristina que es mentira que primero hay que crecer para después distribuir. Es totalmente al revés. Para poder crecer es necesario, imperioso distribuir la riqueza, mejorar los ingresos, mejorar los salarios.

Dijo Cristina, porque uno escucha en estos días que muchos dicen que nos esperan años venturosos porque Argentina tiene todo lo que el mundo necesita y demanda. Tenemos energía, tenemos petróleo, litio, alimentos. Entonces pareciera que tenemos asegurado un futuro venturoso.

Miren, lo expresaba así, antes de la conquista de los españoles alguien que vivía en Potosí y decía, si acá está la plata que necesita Europa y el mundo, o en África, que hay diamantes también, entonces como hay cosas valiosas, recursos naturales, se necesitan, se demandan y se precisan, parece que está todo solucionado. Esa es una discusión que nos espera. No alcanza con tener recursos naturales, no alcanza con tener riquezas carboríferas, mineral, ni siquiera alimenticia. Es necesario discutir donde esa riqueza genere distribución, donde esa riqueza genere industrias y no reprimarice, donde esa riqueza genere y tecnología y ciencia. No alcanza, hay que enfrentar los intereses que quieren saquear la riqueza argentina, hay que pelearse con quien haya que pelearse para que todos esos recursos alimenten a nuestro pueblo, a nuestro país. No alcanza con poner un caño que se lleve el petróleo, el gas. Necesitamos que la energía juegue para la soberanía nacional. Y eso existe como posibilidad, no porque apareció petróleo en Vaca Muerta, sino que la vaca estaba muerta antes de que Cristina recuperara YPF.

Compañeros, compañeras, tenemos por delante un gran desafío. Lo mencionaba ayer la compañera. El FMI y que les quede a todos perfectamente claro, al que Néstor sacó de nuestro país, generando una independencia económica, que no teníamos desde tiempos de Perón, sus consecuencias, sus condicionamientos, tienen un solo responsable. Ese responsable se llama Mauricio Macri. Es el macrismo. Es (Horacio Rodríguez) Larreta, es (Patricia) Bullrich. Ellos nos trajeron al Fondo.

Pero es cierto también, que la convivencia, a partir de que vino el Fondo, esas limitaciones, esos programas que siempre son iguales para todos los países, esa situación de dependencia que intenta generar, necesita de nuevo un gobierno que se plante y diga que no. Que primero hay que crecer para poder pagar y que para crecer hay que distribuir, y que primero está nuestro pueblo y luego está cualquier compromiso. Nadie habla de no pagar o de defaultear, hablamos de defender los intereses nacionales.

Por eso, cuando tratan, como ahora de prohibir a Cristina, quieren ignorar la historia. Quieren ignorar las luchas. Sepan muy bien que a Cristina Fernández de Kirchner, no se la va a poder proscribir, porque este pueblo la va a bancar, porque este pueblo la va a acompañar. Porque el pueblo no es tonto. Porque la proscripción se rompe levantando nuestra voz, organizándonos, se rompe con militancia, compromiso, se rompe con el pueblo en la calle. Se rompe diciendo que al peronismo no le van a condicionar ni sus candidaturas ni la presidencia. Que si el pueblo quiere a Cristina va a ser Cristina.

Por eso, le doy una importancia histórica en esta fecha donde tenemos también un intento de proscripción, como tantas veces nuestro pueblo con organización, con militancia, con lucha, con compromiso, va a romper esa proscripción.

El año que viene va a gobernar la Argentina alguien que defienda los derechos, no nos va a gobernar una derecha que viene a aplastarlos. Por eso en esa discusión de la derecha o los derechos, no puede haber una democracia limitada, condicionada y achicada. Y créanme, este plenario es el comienzo de un trabajo incansable que haremos de cara a nuestro pueblo y en todos lados. Esta proscripción se empieza a romper hoy.
No aceptamos que persigan, que ensucien y que prohíban, vamos a pelear por nuestros derechos, por los derechos del pueblo y por Cristina.

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