El secretario general de la CTA, junto a Edgardo Llano y miembros de la Comisión Directiva de APA, encabezaron la asamblea de los aeronáuticos la noche del 14 del corriente.

Una nutrida asamblea del personal aeronáutico tuvo lugar en la zona C del Aeroparque porteño. El encuentro, realizado a partir de las 20:00 y bajo un frío intenso, se realizó en el área contigua al estacionamiento abierto de la estación aérea. En la oportunidad, el Secretario General de la CTA, ratificó la decisión de efectuar plenarios y encuentros regionales en todo el país para fortalecer y tensar toda la organización en pos de la lucha por todas las reivindicaciones globales y sectoriales de las trabajadoras y trabajodores

Hugo Yasky: “Compañeras, compañeros, empiezo diciéndoles que hay que agradecerles a ustedes, que están acá, en esta reunión bancando el frío, pero sintiendo el calor de la unidad, el calor que sentimos cuando estamos juntos en un momento en el que sé que estamos en la previa, en el umbral de un momento que tiene que poner a prueba la fuerza de los trabajadores, las convicciones y sobre todo el compromiso para defender nuestro país, la democracia, para defender a quienes nos representan.

Mañana ustedes van a estar defendiendo el conflicto que quizás se inicie a partir de la decisión del gobierno de desguazar parte de las conquistas que hemos obtenido.

Ellos tienen entre ceja y ceja la empresa Aerolíneas Argentinas. Hoy, en una reunión por otro tema, uno de los compañeros, un diputado, decía: “Es increíble cómo la empresa Aerolíneas Argentinas, se les presenta a la derecha y a los neoliberales, como una especie de obsesión. No soportan que exista una empresa de bandera nacional como Aerolíneas Argentinas”. Y si hoy estamos acá, si hoy todavía en los mostradores está el emblema de Aerolíneas Argentinas, y si hoy la empresa existe, es por la lucha de todos ustedes. La empresa existe porque el sindicato se puso al hombro, con la voluntad de los trabajadores y las trabajadoras, en una pelea que parecía no iba a tener fin, la decisión de que los argentinos, las argentinas, tuviéramos aerolínea de bandera. Si es por éstos que hoy gobiernan y por sus padres y por sus abuelos, hace rato que Aerolíneas Argentinas no hubiese existido. Por eso les reconozco ese compromiso con esta empresa que es producto de la lucha de nuestro pueblo.

Y también les agradezco la confianza que ustedes expresan para con la CTA, una Central en la cual los trabajadores nos puedan parar y agradecernos haber elegido a un compañero dirigente. Eso es un orgullo enorme. Porque eso se gana. No es algo que se obtiene porque uno sepa hablar, ni porque sea rápido para moverse. Se gana poniendo el pecho, demostrando todos los días que uno vive como viven los trabajadores. No queremos más dirigentes sindicales que sean potentados, adinerados, que vivan en mansiones, el dirigente sindical tiene que vivir como viven los trabajadores que uno representa. Tiene que sufrir las mismas cosas, tiene que tener los mismos sueños, tiene que compartir los mismos ideales.

A nosotros no nos va a pasar que en un acto que hagamos tengamos que vivir el papelón, para no decir otra palabra, que vimos el otro día, en la Sociedad Rural. No nos va a pasar porque nunca vamos a querer llevar a un representante de la derecha, de la clase dominante, de los que hicieron negocios con el hambre del pueblo argentino a que le hagan un homenaje los trabajadores.

En cambio, si tenemos que defender una presidenta, si tenemos que defender a quien representó al pueblo argentino, en un gobierno que hoy lo quieren mostrar como un gobierno que se organizó para tener una coartada para llevarse la plata, el PBI, y todas las pavadas que dicen, hay un gobierno que vino a la Argentina a devolver a los trabajadores derechos, a recuperar el patrimonio nacional, a distribuir la riqueza.
La derecha no le perdona a ese gobierno haberle dicho No al ALCA; haber bancado la recuperación de Aerolíneas, de Repsol, haber tenido la Ley de Financiamiento Educativo, haberle sacado la jubilación privada a los dueños del capital financiero. No le perdonan que hayamos tenido movilidad jubilatoria, que hayamos tenido paritarias libres, que hayamos tenido por primera vez, ya que estaba congelado por 20 años el Salario Mínimo, Vital y Móvil. No le perdonan que haya puesto de pie a los trabajadores. Que se haya acabado la Argentina en la que el trabajador agachaba la cabeza. Volvimos a sentir lo que habrán sentido nuestros abuelos, nuestros viejos en la época de Perón y Evita. Y eso la derecha no lo perdona. Por eso la derecha decidió perseguir a Cristina Kirchner, como en Brasil lo persiguen a Lula. Es exactamente lo mismo. Y los patrones de estos tipos son los mismos.

Capaz que acá hay trabajadores o trabajadoras que mañana, cuando haya elecciones votarán a otro, o quizá hayan votado a otro, o que quizá hasta puede haber alguno que lo haya votado a este personaje nefasto que está hambreando al pueblo, puede haber pasado, eso no importa. Lo que debemos tener en cuenta porque no se puede permitir el olvido, es que la democracia que con tantos compañeros asesinados y torturados recuperamos los trabajadores -porque los que recuperamos la democracia fuimos los trabajadores y las trabajadoras luchando- se termine convirtiendo en el felpudo en el que la clase dominante se lava los pies para seguir haciendo negocios a costa de nuestro hambre. No nos dejemos engañar. Todo este circo que están armando es porque no se bancan la posibilidad de que el pueblo vuelva a ser gobierno, que se dé como un hecho real, en el año 2019.

Tengamos la tranquilidad de conciencia de saber que estamos parados en el lugar donde hay que estar parados. Vamos a defender Aerolíneas Argentinas, las leyes laborales, los puestos de trabajo. Si el gremio APA y demás gremios de la actividad aeronáutica van a dar lucha, la Central de los Trabajadores va a estar acá, pero va a estar también convocando a la CGT, a la otra CTA. Tenemos que estar todos bancando cada lucha y ése es el compromiso.

¡Fuerza compañeros, fuerza compañeras! ¡A no bajar los brazos!”

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