Diez trabajadores de la empresa de seguridad privada MCM, de la línea de tren Roca, agremiados al Sindicato de Trabajadores de Seguridad Privada (SdeTdeVP-CTA), fueron despedidos previo a los comicios programados para elegir delegados. Realizarán un reclamo en la cabecera de Constitución, el martes 26 a las 13:00.
Con el respaldo de nuestra Central, el SdeTdeVP denunció la persecución gremial por parte de la empresa MCM, que terceriza el servicio de prevención en los ramales Roca, Sarmiento y Mitre, y convocaron a una manifestación en el hall central de la estación Constitución, el martes 26 de febrero a las 13:00, para exigir la reincorporación de los trabajadores despedidos.
En un comunicado subrayaron las prácticas “antisindicales” y “antidemocráticas” de la empresa. Además, manifestaron que la respuesta que les dio el representante legal y gerente de RRHH de la empresa fue que “si se afilian a un sindicato, debe ser a la UPSRA, dado que es la única organización sindical que la empresa reconoce como válida”, violando la libertad sindical de las y los trabajadores.
Los delegados electos cesanteados mantuvieron una reunión con el secretario general y el secretario gremial del sindicato de los trabajadores de seguridad privada, José Mario Fariña y Gabriel Carbajal respectivamente, y esperan la pronta resolución del conflicto. Se trata de los compañeros José Alberto Miotti, Roberto Carlos Santacruz, Pablo Martín Siffer, Ariel Chávez, Leandro Alarcón y Gabriel Molina. También fueron despedidos los trabajadores Daniel Díaz y Pablo Britos, y los vigiladores del ramal Sarmiento Cristian Orozco y Sergio Rodríguez.
“Los compañeros necesitaban una representación sindical. Se acercaron al sindicato y comenzaron a afiliar a sus compañeros. Principalmente necesitaban organizarse para reclamar a la empresa de seguridad lo que corresponde. La empresa comenzó a hacer maniobras antisindicales, a discriminarlos y hoy nos desayunamos con que los seis delegados fueron despedidos de la empresa MCM”, relató Carbajal y agregó: “Legalmente vamos a rechazar cada carta documento porque no tienen justificatorio, porque nosotros cumplimos en tiempo y forma todos los pasos legales para llevar a cabo las elecciones. En lugar de ir a un diálogo, la empresa los despide. Pedimos que la empresa revea esta situación y solucione los problemas”.
El SdeTdeVP-CTA tiene diez años de existencia y cuenta con más de 800 afiliados y afiliadas de distintas empresas de seguridad privada en todo el país. Mientras que los empleados de MCM son alrededor de 120, siendo únicamente tres las mujeres trabajadoras. Luchan en primer lugar por la reincorporación de los despedidos y por el cese de la persecución gremial. Aunque también exigen el respeto de sus derechos laborales, el mejoramiento de las condiciones de trabajo y el pago de las horas extras.
Hace cerca de tres meses que los trabajadores comenzaron a organizarse sindicalmente para reclamar por sus derechos. Uno de los seis delegados electos despedidos, Miotti, trabajaba en la empresa MCM desde hace un año y medio. “Hubo muchas injusticias. La empresa todos los meses le va sacando el sueldo a los trabajadores. Por eso recurrimos a un sindicato que nos respalde y nos sentimos cómodos en este sindicato. No nos podemos mostrar mucho porque automáticamente la empresa toma represalias, persecuciones, y nos tenemos que cuidar mucho”, detalló. Otro de los reclamos esgrimidos por los trabajadores es que no cuentan con un tiempo suficiente de descanso ni con un lugar apto. La empresa no les provee un comedor ni un espacio de descanso apropiado y tampoco un cambiador. Además suele haber ratas en los lugares de trabajo y sufren la lluvia, el frío o el calor, dependiendo de la época del año.
Por su parte, el delegado electo Siffer, que trabajaba en la empresa desde hace tres años y siete meses, relató que estuvo un tiempo trabajando como encargado y supervisor y era muchas veces obligado a “perseguir” compañeros por injustas causas hasta que sufrió un accidente laboral, una distención ligamentaria de la rodilla derecha, dado que pasan prácticamente las nueve horas de trabajo de pie, y lo bajaron al puesto de vigilador. También tuvo que hacerse cargo de su plena recuperación dado que la ART, contratada por la empresa, no cumplió con la totalidad del tratamiento. Además, explicó que lo habían puesto como supervisor de los tres ramales cuando por lo general no pueden estar a cargo de más de una línea.
Por último, el delegado electo Santacruz reforzó la convocatoria a todxs lxs trabajadorxs de la Central a manifestarse el martes 26 a las 13:00 en la cabecera Constitución del ferrocarril Roca “para poder terminar con la maldad que tienen estos empresarios”, manifestó. “Esperamos que nos reintegren porque están acusándonos sin motivos. Nos afiliamos porque queremos una estabilidad con los compañeros, un sueldo digno, que nos dejen de sacar plata con las horas extras, los sábados, los domingos y los feriados; el Día del Vigilador que no lo pagan. Pedimos que todos los sindicatos se acerquen el martes a apoyar este reclamo”.