Desde el viernes pasado, integrantes de la Lof Quemquemtrew que han iniciado un proceso de recuperación territorial en la zona de Cuesta del Ternero, se encuentran incomunicados y sin la posibilidad de recibir alimentos y abrigo. La Policía de Rio Negro ingresó de manera abrupta al lugar y en estos momentos se encuentra cortando la ruta provincial 6 y ocupando la Escuela Pública como base de operaciones. Integrantes de pueblos originarios de la zona y organizaciones sociales realizan un acampe desde ayer y denuncian la violación de todo tipo de derechos. Responsabilizan al Gobierno de Rio Negro y al poder Judicial por los hechos de violencia vividos.
Un cordón policial impide pasar comida y abrigo a los integrantes de la Lof que andan hace días en el territorio.
¿Cómo elegir que registrar? ¿Cómo capturar en una imagen la organización, la templanza y la determinación de un pueblo que determina sus temporalidades para tomar decisiones? Acaso si elegimos aquellas fotos de las balas que siempre vienen del mismo lado uniformado ¿no corremos el riesgo de que los medios poderosos armen encabezados con “los mismos violentos de siempre”? Y al mismo tiempo si en las imágenes mostramos las rondas que se arman en cada trawn que se improvisa para tomar decisiones colectivas y horizontales ¿no estaríamos desdramatizando la mentira de acuerdos previos con funcionarios y responsables de turno cuando una comunidad mapuche pidió diálogo y le respondieron con golpes y amenazas? Y, por último tantas veces queremos mostrar las caras, miradas y gestos de las mujeres, niñes, ancianes y hombres que esperan por decisiones que se discuten puertas adentro de vaya saber una donde ¿Pero fotografiarles no sería condenarles al escrutinio de una ciudad que aún no reconoce el derecho ancestral de la tierra hacia aquellos pueblos que están acá desde antes de que existan las fronteras y el Estado Nación? La capucha, la gorra, el paliacate, o la excusa que elija el poder va a servir para identificar a “esos otros” como peligrosos.
Las imágenes indudablemente son selectivas, son subjetivas y por lo tanto son políticas. Pero cuando esto se explicita, es más sencillo poder dar cuenta de una narrativa construida desde las entrañas. Desde el haber estado allí. Nada de lo que se registra o se relata fue escuchado de oído. Sí fue cuidadosamente seleccionado para intentar llegar con una información lo más completa posible.
Ayer a condenarle las 14 hs se convocó a un trawn (reunión, parlamento) en el ingreso al paraje Cuesta del Ternero. La convocatoria fue en la intersección de ruta nacional 40 y ruta provincial 6. Esto queda a unos 110 kilómetros aproximados desde Bariloche, camino a El Bolsón. La idea siempre fue realizar un corredor humanitario que habilitase a las familias y organismos de derechos humanos y agrupaciones a pasar comida y abrigo a los integrantes de la Lof Quemquemtrew que permanecen en el territorio en recuperación. Desde el viernes pasado, momento en que las fuerzas policiales rionegrinas ingresaron violentamente al lugar, se llevaron detenidxs a algunxs e imputaron en causas a otrxs, la situación es crítica. Quienes resisten en el territorio se encuentran incomunicados, “sitiados”, “hostigados”, en un estado de total abandono y desidia por parte de quienes tendrían que resolver el conflicto de manera urgente. Llámese Gobierno de Rio Negro, Poder Judicial o autoridades y organismos que trabajan la temática.
En todo momento dicha convocatoria fue pacífica. Niñes y ancianes de distintas comunidades como Nahuelpan, Winkul, Lago Rosario, Pillan Mahuiza, Lepa, Newen tu Aiñ Inchin, Las Huaytekas, entre otras, se acercaron al lugar. Este de por sí es un proceso histórico para un pueblo que ha sido despojado de sus territorios, llevados a campos de concentración y silenciados durante años por una historia oficial que aún se empeña en negarlos o criminalizarlos por sus trayectorias o historias de vida.
El contexto de este evento es importante, pues habla de un pueblo que se vuelve a levantar y para eso es importante contar con territorios. Pecan de ignorantes los argumentos que desconocen cómo las campañas militares de 1880 siguen operando con mecanismos de despojos, haciendo que las familias aún arrastren estas tristezas, y hoy estén desparramadas en los barrios más vulnerables de las ciudades, alejados y alejadas del campo y las tierras. Todo esto en complicidad con los grandes medios de comunicación, encargados de propagar discursos de odio, que responden a pautas publicitarias oficiales como ocurre en Rio Negro. Desconocen (no por ingenuidad) los compromisos aprobados por Argentina desde la aprobación de la Constitución de 1994, en particular, a través del art. 75, inc. 17. O incluso los tratados internacionales que el país ha suscripto (i.e., el Convenio 169 de la OIT, art. 14 inc.2).
Ñañas de más de 70 años acompañan la reivindicación territorial en Cuesta del Ternero.
Para las 14 en la ruta ya había más de 50 personas reunidas. Se hicieron purrun (bailes que den fuerza al momento) con un corte de ruta que duró unos 20 minutos nada más para poder organizar el mejor modo de subir hasta el territorio que esta unos 16 km alejados de la ruta. Se organizaron los autos y se realizó una caravana de más de treinta autos. Otras personas que habían intentado pasar nos habían advertido a les presentes que no nos dejarían transitar por el lugar. Sin embargo al pasar el primer cordón policial nos dejaron pasar, lo que no sabíamos es que al hacerlo nos sacaban del campo visual público y nos encerraban entre dos cordones policiales. El que se había armado a pasos de la Comisaría de Cuesta del Ternero y el que nos separaba de la ruta provincial 6.
Los autos seguían en fila ordenada y tranquila cuando los dos primeros que encabezaban la fila (con ancianas y niñes en su interior) siguiendo el permiso dado por el primero de los retenes policiales, se dispuso a ingresar. A partir de allí la policía tuvo por diez minutos carta blanca. Oficiales de la policía de Rio Negro y del COER se subieron a esos dos autos gritando y sacudiéndolos, mientras que tiraban tiros al aire y desde los laterales tiraban piedras a quienes estábamos esperando el paso que nos habían asegurado. Fueron 10 minutos en donde ninguna bala se perdió en un cuerpo mapuche o ninguna piedra le partió el cráneo a un nene o ningún uniformado logró abalanzarse con todo su peso sobre la ñaña de 70 años que caminaba con su Kultrun para llevar newen a los autos. Pero nada de eso paso porque la gente salió de los autos a pedir que parasen, a cubrir a los nenes y nenas que lloraban. Era una convocatoria pacífica y humanitaria. Pero desde esos 10 minutos la estrategia del poder se hizo visible: provocar, hartar, hostigar, amendrentar, postergar. Mientras el frío seguía aumentando y los fueguitos iban a pareciendo para reunirse alrededor, la guardia no se bajaba. Pero no porque son violentos quienes recuperan territorios. Sino porque el poder de nuevo no cumplió con su palabra, y la policía tuvo su carta blanca. El personal policial presente en el lugar fue creciendo cada vez más.
“¿Quién es el responsable de ustedes?”, preguntaba uno de los oficiales. Pacientemente se le explicó que al hablar con parte de un pueblo no hay un responsable, que las decisiones se toman en parlamento y que «se dio la necesidad de armar un corredor humanitario para llevar alimentos. No pretendemos discutir el conflicto madre. No nos queremos meter en el territorio. Pero hace cuatro días que la gente no se alimenta y no sabemos en qué situación está«, señaló uno de los lonkos allí presente. Hecho de total ilegalidad, cargado de inhumanidad, que aún sigue sin ser entendido por el sistema judicial opresor.
Otras comunidades vecinas acompañan el reclamo de la Lof Quemquemtrew.
Las horas siguieron pasando, después de un trawn se decidió ingresar en la comisaría a mantener una reunión con el oficial a cargo. En un primer momento se acordó que pasen cinco personas al territorio. Hubo un respiro, lo importante era acercar las donaciones que se habían llevado. Se hizo un cordón y se cargó una camioneta con las cosas. Se eligieron las personas que pasarían, pese al imaginario y construcción de la prensa, quienes se eligieron para pasar fueron dos ancianas porque iban a “poder llevarles fuerza y newen”, una mujer y dos hombres más que eran quienes habían ingresado a pedir eso a la comisaría. Al rato, se avisó a los presentes que eso no podía suceder hasta que se autorizase de más arriba. ¿Arriba de dónde? Se escuchó preguntar a alguien como ya sabiendo en su cuerpo que ese arriba nunca baja a tiempo. Los tiempos judiciales no se condicen con las realidades.
Entonces, ya siendo las seis de la tarde, el clima frío y la falta de escucha calaron en lugares donde la memoria habita. “Entremos igual”, “se nos van a morir de frío mientras esperamos vaya saber a quién” “hay que estar tranquilos nos quieren cansar” “solo es pasarles abrigo y comida…nada más” Se armó un fuego más alejado del cordón policial. Se volvió a hacer trawn. Allí una delegada de UNTER manifestó su preocupación por la situación en la escuela de Cuesta del Ternero que fue sitiada también y ocupada por fuerzas policiales para utilizarse como “centro de operaciones”. Pasando en limpio: la policía rionegrina tomó la escuela, suspendió las clases y opera desde allí adentro. A veces la información debe ser clara y concisa para que no se tergiverse.
A esta preocupación se sumó la noche que seguía cayendo y la gente allí presente decidió quedarse a dormir para resguardar la vida de quienes estaban del otro lado del cordón policial incomunicados hace tres días. De pronto, con ayuda del viento desde la montaña más cercana se escuchó un afafan, una señal de vida, de que estaban allí (con frío, sitiados, sin alimentos y a la intemperie) pero ahí. Las mujeres y niñes gritaron de felicidad y emoción al escucharles a través de los km que los separaban, el kurruf (viento) estaba a su favor y la voz había llegado a tiempo.
A estas horas del mediodía aún no hay una respuesta favorable, no dejan pasar los alimentos y comidas y las provocaciones siguen llegando. Se siguen viviendo momentos de tensión. Al pedido concreto del CODECI (ingreso de alimentos y mesas de diálogo que propone lof quemuemtrew), el Juez Calcagno respondió que deberán esperar hasta una nueva audiencia que se realizará mañana. El pedido humanitario que se ha postergado hasta mañana. Han elevado una nota al juez para que acelere los tiempos. Son muchos días ya.
Algunos referentes se acercaron a la comisaría para poder comprender cuál es la orden que impartió de la fiscalía.
Es una situación de tortura, sostienen desde las comunidades que se quedarán realizando acampe hasta ser escuchadxs. Pero los conflictos se aceleran con el correr de las horas. Mientras algunxs se quedaron en dicho acampe, hubo otros que con afán de conseguir señal y enterarse de las novedades tuvieron que salir del lugar. El único punto con internet en la zona es la Escuela que como ya se dijo, está ocupada por las fuerzas de seguridad. ¿Más casualidades?
En estos momentos, la Policía no deja re ingresar a la comitiva que había salido del acampe. Esto es por orden de la fiscal Betiana Cendon. Temen por la seguridad y la integridad de las personas que “han quedado sitiadas” y responsabilizan al gobierno provincial y al Poder Judicial por los hechos que allí puedan ocurrir. Por ello, están convocando nuevamente a que se acerquen al mismo lugar de ayer.
Por otro lado, también denuncian que se han desatado otros focos de hostigamientos por parte de las fuerzas policiales en comunidades cercanas como en la Lof Catriman. Denuncian que la estrategia es dispersarlxs para restarles fuerza. Por lo vivido en el día de ayer y el acompañamiento en los procesos de recuperación territorial de la zona, difícil que eso suceda.
Por Mariel Bleger (Integrante del Grupo Gemas) y Luciana Avilés
Fotos: Mariel Bleger
Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen
Publicada originalmente en: https://almargen.org.ar/2021/09/28/cronica-desde-el-territorio-lof-quemquemtrew-sitiado-por-la-policia/