Hugo Yasky "Hay un margen para reducir la jornada, por el fenómeno de elevación de la productividad y achatamiento de los salarios"

Ari Lijalad: ¿Podés explicar en qué consiste el proyecto que presentaste para reducir la jornada laboral?

Hugo Yasky: Es un proyecto que plantea bajar de las 48 horas semanales, que actualmente tiene por ley la jornada laboral en la Argentina a 40 horas. Hay otro proyecto, que lo presentó la compañera Claudia Ormaechea, que es diputada de nuestro bloque y también sindicalista de la Bancaria, que propone 46 horas semanales como jornada laboral. Ambos proyectos van a unificarse. Vamos a buscar una síntesis para que haya una sola propuesta. Una posibilidad es que se tome como punto de máxima 36, pero haya una gradualidad para ir yendo paso a paso hacia ese objetivo, que fue lo que hizo Chile. Chile tenía 48 horas y ahora ya está en 40, pero vino con una jornada de 44 horas, después llegó a 40.

La idea es que podamos empezar a discutir esto en la próxima reunión de la Comisión de Trabajo, que convocó la presidenta de la Comisión, la diputada Vanesa Siley. Se va a escuchar la opinión de las centrales sindicales. Hay dos reuniones para eso. En la primera vamos a estar la CTA Autónoma y la nuestra. Va a estar también, para escuchar cuál fue la experiencia en España, Cristina Faciaben, Secretaria de Relaciones Internacionales de Comisiones Obrera. Va a participar también la representante en la Argentina de la Fundación Friedrich-Ebert, para hablar de la experiencia en los países de Europa de reducción de jornada laboral y está previsto que en la segunda reunión participe la embajadora de Chile, que es una mujer que también pertenece al movimiento sindical y va a hablar respecto a la experiencia chilena y va a estar la directora de la OIT en la Argentina, planteando cómo eso se fue dando en muchos países del mundo que tienen convenios con la OIT.

A.L.: ¿Cuál es el fundamento de reducir la jornada laboral?

H.Y.: El primero es porque esta jornada laboral se instituyó en el año 1919, cuando se fundó la OIT. En la Argentina, unos años después se convirtió en una norma legal. Imaginate que estamos hablando de un tiempo, a principios del siglo pasado, donde muchos avances impactaron después en la productividad y no se habían registrado, pero además de esos avances que revolucionaron los tiempos de la producción, la renta empresaria, la productividad, además de eso, ocurrieron cambios culturales fenomenales, como es el hecho de que la inmensa mayoría de las mujeres, dejó de ser la retaguardia que estaba a cargo del hogar, cuando el hombre iba y trabajaba 12, 14, 15 horas. La mujer estaba en el hogar, era la típica ama de casa. Eso ya, prácticamente no existe. Hoy trabajan el hombre y la mujer. Entonces tenés ausencias de los adultos durante largas jornadas porque a eso hay que agregarle el tiempo de traslado, como se le llama. La ausencia en el hogar, en las tareas de cuidados, los tiempos que se pueden ganar para la vida de las personas. Y por el lado empresario, se ha demostrado que la productividad no se resiente, que hay menos accidentes de trabajo, menos ausentismo laboral. No hay absolutamente ningún perjuicio económico para el sector empresario.

A.L.: Mencionabas personas de otros países que van a participar en el debate. ¿Dónde se aplicó esto y qué resultados tuvo?

H.Y.: La mayoría de los países de Europa, salvo Grecia, que en estos días salió con una que va absolutamente en sentido contrario, como es extender la jornada, una locura. Creo que están hablando de seis días de trabajo con 14 horas. Un delirio. Pero la mayoría de los países, en la década de los 90, fueron reduciendo la jornada. En algunos casos 40 horas, en otros a 36. Ahora ya están habiendo experiencias piloto para avanzar un poco más y tener una semana laboral con un día menos. Esto se está haciendo en algunos países de Europa, España, por ejemplo. Es cierto que esto está siendo una experiencia piloto y está siendo monitoreadas por las autoridades de trabajo y tiene algún tipo de estímulo para las empresas que están en ese programa. Ya se empieza a avizorar la idea de un día menos de trabajo por semana. Es decir, una semana de lunes a jueves.

Natali Risso: ¿Ya tienen algún panorama de cuál va a ser la postura de la oposición sobre este proyecto?
H.Y.: En principio, tuvimos alguna discusión en la Comisión. No quisiera generalizar, pero en líneas generales hay un planteo refractario al tema de acortar la jornada, aunque hay sectores que forman parte de la oposición, que también están de acuerdo en acortar, una parte del socialismo, algún sector del radicalismo. Pero creo que, en términos generales, la oposición va a estar en contra.

N.R.: En línea con eso está previsto convocar a algunas de las cámaras empresariales, porque después tienen mucha resonancia en los medios, y quizá estaría bueno también marcarlas en el recinto.

H.Y.: La idea es convocar a las cámaras empresarias y escuchar a todos porque no solamente queremos quedarnos con la voz de las principales cámaras, de los sectores más fuertes, sino también escuchar a las Pymes, porque son los que más empleo generan en la Argentina y no queremos dejarlos afuera de esto.

A.L.: Vinculado a la productividad. Uno, por sentido común, si trabaja más, produce más. ¿Qué pasó en los lugares donde se redujo la jornada laboral con la productividad?

H.Y.: Se mantuvo en los mismos niveles o se incrementó. Está claro que antes, cuando no existían los avances científico tecnológicos que hoy existen, y que evidentemente elevan la productividad y por tanto la venta empresaria, antes se trabajaba 8 horas. Se demostró que se eleva la calidad del trabajo al haber menos horas, por dos factores, no solamente por la reducción de accidentes, sino porque se trabaja en mejores condiciones. El ser humano que trabaja lo hace en mejores condiciones, menos estresado.

A eso hay que sumar el hecho de que la incorporación de los avances tecnológicos aplicados a la producción, elevó la renta empresaria y la productividad. En muchos casos, eso no se refleja en los salarios. Hay una tendencia en el mundo a que los salarios decrezcan. En este momento hay una gran huelga de los obreros de empresas automotrices en Estados Unidos de Norteamérica, una huelga que ya lleva más de una semana. Está prevista una marcha.

Hoy me sorprendí viendo que Biden iba a participar en esa marcha. Los obreros están denunciando que están trabajando jornales extendidos, que los salarios los alejan más del por el crecimiento de poder adquisitivo, de poder acceder a la canasta. Estamos con un fenómeno de elevación de la productividad y achatamiento de los salarios y ahí hay un margen para reducir la jornada, sin que esto signifique pérdida para el sector empresario.

Entrevista: https://ar.radiocut.fm/audiocut/hugo-yasky-proyecto-plantea-bajar-48-horas-semanales-a-40-horas/