El secretario general de la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), Edgardo Llano, destacó la importancia de la asunción del presidente Luiz Inácio "Lula" da Silva en Brasil y alertó sobre el avance de la derecha para debilitar las democracias latinoamericanas. “La organización del movimiento obrero es fundamental en esta etapa”, afirmó.
En diálogo con Contraeditorial, el dirigente elogió el reciente lanzamiento de la CELAC social y sostuvo que el movimiento obrero es fundamental a la hora de generar encuentros, debates y reflexiones que proponen otros caminos frente a la “deshumanización a la que nos somete el capitalismo financiero”.
Llano también condenó las persecuciones sufridas por dirigentes sindicales durante el gobierno de Mauricio Macri, rechazó las campañas de violencia política impulsadas desde la derecha y repudió el intento de magnicidio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner “en vivo y en directo para todo el mundo”.
– ¿Qué desafíos abre la elección del presidente Inácio "Lula" da Silva como representante del movimiento obrero a cargo de uno de los principales estados latinoamericanos?
Lula tiene un desafío importante en este mandato, su tercer mandato, que es generar consensos, teniendo en cuenta que no tiene la mayoría en la Cámara de Diputados. Le va a ser muy difícil gobernar con una posición salvaje, como es el bolsonarismo. Obviamente, la experiencia que le dio haber sido dirigente del movimiento obrero del ámbito metalúrgico, le da la capacidad para poder enfrentar este momento difícil para la región.
Creemos que Lula va a ser el hombre indicado para volver a liderar la región, como lo hizo en la etapa anterior de su presidencia.
En este marco el movimiento obrero tiene una importancia fundamental para desarmar el tipo de operaciones como se dieron en Argentina, en Brasil, en Ecuador, en Bolivia: acciones mediáticas y judiciales que debilitan la democracia. Le pasó a Lula, le pasó a Evo, le pasó a Correa, pasó primero en Honduras de Zelaya.
– Lula da Silva fue uno de los presidentes latinoamericanos afectados por la manipulación de la justicia y las operaciones mediáticas combinadas. En nuestro país ello se extendió a la persecución y criminalización de la vicepresidenta Cristina Kirchner y a dirigentes y a delegados sindicales y sociales. ¿Qué importancia tiene la organización del movimiento obrero en desarmar estás operaciones?
– El movimiento sindical es fundamental en esta etapa, porque el problema que tiene el mundo es que cuando un dirigente sindical llega a la presidencia, se hace una gestión buena como la que hizo Lula, entonces es el enemigo a vencer de alguna manera.
Por eso se generó la mentira, todo el avance de los medios concentrados que trabajan, por lo general para los candidatos de derecha.
La organización del sindicalismo es fundamental en la región, teniendo en cuenta que los sindicatos mayoritariamente tienen ordenadas sus cuestiones para adentro, y eso obviamente genera mucho malestar en sectores de la derecha.
Así que la organización del movimiento obrero es fundamental en esta etapa, donde anuncian que vienen por el movimiento obrero, vienen por los derechos conseguidos. Por ello el reciente lanzamiento de la CELAC social. Porque somos los que generamos encuentros, debates, reflexiones y reconocimientos como los otros que ponen límite a la deshumanización a la que nos somete el capitalismo financiero. Estamos acostumbrados a tener una buena base de organización los sindicatos, y en ese camino vamos a seguir para defender los gobiernos populares que tengamos en la región y establecer las agendas de la emancipación.
Y ante el avance de las manifestaciones que hemos visto, totalmente antidemocráticas en los últimos tiempos, creo que lo más grave que se ha visto, me parece que en lo que va del siglo, es el intento de asesinato de Cristina Fernández.
– Desde el intento de asesinato a la vicepresidenta a los escraches a Roberto Baradel estas manifestaciones tienen una dimensión en la promoción de discursos de odio por parte de sectores políticos y medios concentrados.
– Previo a eso, habíamos empezado con escraches, ya en el gobierno de Macri, y la persecución a la familia de Roby y a otros dirigentes sindicales, nos pasó a los aeronáuticos también de ser perseguidos por el entonces Ministerio de Transporte a cargo del ministro Dietrich, una política muy habitual que utilizaron en el macrismo.
Pero hoy se animaron a mucho, se animaron a intentar matar a la vicepresidenta en vivo y en directo para todo el mundo. Acá, las instituciones se tenían que haber puesto un poco más duras, un poco más exigentes. Vimos un poco de tibieza en las Cámaras de Diputados, en la Cámara de Senadores y en el mismo gobierno, más allá de alguna cadena nacional y los repudios que obviamente tenían que salir, me parece que no se ha generado una acción política suficientemente importante para evitar que pasen estas cosas.
– ¿Cuál debe ser el rol del movimiento obrero en la coyuntura actual? ¿Cómo debe desarrollarse la participación de las representaciones obreras en el marco del proceso eleccionario en curso?
– En este momento, en la coyuntura política que vivimos en Argentina o que vivimos en la región, el movimiento obrero tiene que tener un rol más importante, de más protagonismo, más participativo.
Y no me refiero participativo en cuanto a ocupar cargos en las listas, creo que la cosa no pasa por ahí, eso que lo hagan los políticos, que seguramente lo van a hacer mejor. Pero el sindicalismo argentino, que tiene que ser un órgano de consulta permanente de los gobiernos, porque el sindicalismo ha demostrado que ha conseguido resultados a lo largo de la historia, no ha conseguido resultados positivos, ha sabido en Argentina defender de la mejor manera posible los intereses de los trabajadores sin importar el ámbito de trabajo. Creo que lo ha demostrado, ha perdido muchos dirigentes también, el sindicalismo ha sido perseguido, ha sido castigado, torturado, ha sido desaparecido, mucho es diligente.
Entonces, ¿cómo vamos a desarrollar la participación en esta etapa? Es con eso, es con compromiso, con participación, con inteligencia, con solidaridad y con responsabilidad para acompañar los gobiernos que sean de carácter popular, que tengan una cercanía al pueblo y a los trabajadores.
Pero para eso hay que llegar a este proceso que en octubre vamos a tener una elección para elegir presidente y el sindicalismo se tiene que juntar con los candidatos de origen más popular para consensuar políticas para los trabajadores, pero también para exigirle más participación de los trabajadores en las decisiones de gobierno, no como funcionarios de gobierno, sino como un sector importantísimo de la vida nacional que tiene derecho y necesita y quiere y exige más participación, más consultas donde se lo tenga en cuenta para las decisiones importantes, para que no se repita la historia de que al sindicalismo lo llaman cuando hay que llenar una plaza, cuando hay que movilizar gente, pero no cuando hay que tomar las decisiones importantes que hacen al futuro del país al futuro de los trabajadores.
Publicada originalmente en: https://contraeditorial.com/llano-la-organizacion-del-movimiento-obrero-es-fundamental/