Intervención de la periodista especializada en política internacional e integrante de la Red de Intelectuales en Defensa de la Humanidad (REDH), Telma Luzzani, durante el encuentro organizado por la Secretaría de Género y Diversidad de la CTA Nacional.

En primer lugar agradecer esta invitación. Es un honor para mí estar con Yamile (Socolovsky), con Mariana (Vázquez), con todas ustedes compañeras, a quienes admiro por sus luchas.

Voy a hacer un rápido vuelo de pájaro, para pensar cómo estamos hoy en la política internacional y luego bajar al tema regional y nacional.
En este momento, creo que está claro para todos que el gran enemigo de la humanidad es Estados Unidos. Estamos en un momento de cambio que se puede llamar cambio civilizatorio, cambio del orden internacional. Creo que se está dando un cambio histórico que se puede remontar al Siglo XV, momento en que Europa empieza a tener preponderancia y comienza la decadencia en China.
Estamos realmente en un momento bisagra y la guerra, como suele suceder con todas las guerras, ha acelerado, acelera ese momento y digo que EEUU es el grave enemigo (voy a hacer un breve paso por este país).

El concepto que tienen los norteamericanos de sí mismos, tiene que ver con su mismo origen.
Cuando llegan las famosas trece familias en el Mayflower, y son familias, los “padres fundadores” muy extremadamente religiosas y llegan huyendo de Holanda y del Reino Unido perseguidas por su fanatismo y creen algo que todavía se ve claramente en los dirigentes, en el concepto general que tiene EEUU de sí mismo, creen que han sido señalados por Dios con una visión especial que es la visión “civilizatoria”. Llevar su creencia y su verdad al resto de la humanidad.

A esto ellos lo llaman el “Nuevo Jerusalén” y realmente es la semilla de lo que hoy se conoce como el “extensionalismo norteamericano” y la concepción es esa. En el caso de nuestro continente, que para ellos era un continente habitado por seres inferiores, por seres salvajes que había que civilizar a las buenas o a las malas. Nunca descartaron el rasgo violento. Esto aparece en forma muy clara a fines del Siglo XIX, cuando comienza a expandirse en Cuba, en Filipinas, en Hawai, pero sobre todo, al final de la Segunda Guerra Mundial, y ese orden que ellos implantan al final de la Segunda Guerra Mundial, es el orden que todavía tenemos hoy y es el orden en decadencia.

Ellos en aquel momento, a pesar de que las potencias ganadoras eran, sobre todo la URSS, y Estados Unidos prima la visión de EEUU. Por ejemplo, la creación del Fondo Monetario Internacional, las famosas reglas de Breton Wood, porque una de las crisis importantes hoy, es el poder del dólar como arma, que es uno de los elementos que hay que tener muy claro. Se crea Naciones Unidas, la OEA (Organización de Estados Americanos), una organización aparte para tener un control mayor del continente.

Tanto en los momentos de expansión, como de hegemonía unipolar, que fue luego de la caída de la Unión Soviética, como el actual momento, en que tratan de no decaer o de tener el menor daño posible, el control sobre el continente americano es fundamental. Sin el control absoluto de las tres Américas, les sería imposible no sólo expandirse sino mantener su presencia hegemónica, para evitar esa decadencia.

Después de la SGM, se conformó la estructura que hoy tenemos, con la caída de la URSS, se produce el otro gran momento que es la posibilidad de que EEUU se convierta en la única potencia hegemónica mundial, situación que dura muy pocos años en realidad. La caída de la URSS es en 1991, pero prácticamente, podemos decir que ya en 1997, 1999, ni hablar de 2001, aparecen las primeras señales de que esta hegemonía está empezando a resquebrajarse.

En 1997 aparece uno de los elementos que hoy es importante, empieza la expansión de la OTAN hacia los límites de Rusia. Con esa primera expansión de 1997, que van a ser cinco en total, aparece por otro lado, en partes de Asia, el Asia Pacífico, la Organización de Cooperación de Shangai, que es la primera aproximación entre China y Rusia y los países, centroasiáticos que en algún momento formaron parte de la Unión Soviética: Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán.

En 1999, fundamental, gana Hugo Chávez en Venezuela, y aparece por primera vez con muchas de las organizaciones que se crean: el Alba, Petro Caribe, Unasur, etc., empiezan a aparecer, y en el propio territorio norteamericano, las primeras señales de que esa obediencia irrestricta estaba en riesgo.
Voy a tratar de ser rápida para poder llegar a la situación actual.

A partir de la caída de la URSS y ese mundo unipolar, empieza a crecer cada vez más esta posibilidad de un Nuevo Orden Mundial.

Los tres objetivos que puede tener hoy Estados Unidos, objetivos que son planteados incluso desde los estrategas del Siglo XX, Kissinger, es, en primer lugar, debilitar estructuralmente Rusia, incluso fragmentarla, al estilo de lo que se hizo con Yugoslavia, fragmentada en varias naciones. Sobre esto hay varios escritos al respecto.
Otra cosa, que para EEUU es kriptonita, es alguna posible sociedad entre Alemania y Rusia.
La posibilidad de que la potencia alemana se uniera a Rusia, es realmente vital para Estados Unidos, que eso no suceda.
La otra, evitar también que Europa, aquella a quien ayudó en la SGM, tuviera algún tipo de autonomía.

En esta guerra, que tiene como territorio a Ucrania, porque no podemos hablar de una guerra Rusia-Ucrania, se ve claramente esto. Por un lado el avance de la OTAN como siempre, Estados Unidos miente, promete y no cumple, porque no tiene el menor problema en hacerlo, ya que había prometido que no iba a avanzar. Cuando Gorvachov decide sacar todo el Ejército Rojo de Europa, es porque le promete eso. Ya ven, hoy la OTAN está en Ucrania, al lado de Rusia.
Entonces, en esta guerra se ve el intento de debilitar a Rusia, el intento de enfrentar a Rusia con Alemania en los atentados a los gasoductos Norstream II.

Ustedes saben que Rusia es la gran potencia gasífera mundial, el gas está en manos del Estado ruso; Europa se alimenta, se alimentaba, con un porcentaje altísimo del gas ruso, y el último gasoducto, que iba directo a Alemania, que es el Nordstream II, había otro, que pasaba por Ucrania.
Estados Unidos hizo explotar este gasoducto no sólo para evitar que Rusia vendiera este bien, sino para que Alemania tuviera este problema y ellos (EEUU), venderle el gas a Europa.

Hay bastante material que se puede encontrar respecto a que está probado que fue Estados Unidos el responsable de la explosión del Nordstream II y por lo tanto ya no llega gas a Alemania.
Esto no es mucho problema para Rusia, porque rápidamente reconfiguró sus ventas. En la actualidad está vendiendo mucho gas a India y mucho gas a China, que lo necesita, y además con un beneficio, ya que lo vende en su propia moneda, el rublo. Hacen intercambios comerciales en rublos y rupias o rublos y yen.

Aparecen cada vez más claramente estas situaciones de enfrentamiento. Esta guerra es exactamente eso. Esta guerra no empezó el año pasado, empezó en el 2013 por un planeamiento norteamericano muy detallado, preciso, muy inteligente, para ellos, haciendo lo que se llamaba la “Revolución de Colores”, una revolución interna, obligando al presidente de Ucrania que había en ese momento a huir, y a partir de ese momento promover un gobierno pro europeo que atacaba, bombardeaba, sistemáticamente a una parte rusa de Ucrania.

Lo que se puede ver en esta guerra actualmente es que se articulan los tres conflictos: por un lado la guerra civil en Ucrania, entre una parte pro rusa, que está al Este, pegada a Rusia y la parte pro europea, que ha reverdecido un nazismo latente, existente ahí desde la Segunda Guerra Mundial; una guerra entre Rusia y la OTAN, intentando debilitar esta nación y la dimensión más profunda es tratar de evitar (yo creo que EEUU lo hace de cualquier forma, aun a costa del ecosistema y aun a costa de las vidas de seres humanos), evitar que este Orden Mundial, llamémoslo el viejo, el que nació en la Segunda Guerra Mundial, siga deteriorándose.
La aparición de este orden de Rusia, China, ahora se suma la India, el Brics, que es un gran ejemplo de esto, si se suma Argentina y Argelia, que serían los próximos pasos, sería un gran avance de esta otra nueva forma de orden de las potencias emergentes de un mundo que piensa más en redistribuir, en el caso de China poder también conceptualmente frente a la permanente concentración planteada por el viejo orden está la redistribución.

Lo de China es fundamental. Además de estas cosas que nombré está la nueva Ruta de la Seda, que también llega a Europa y que también EEUU trata de boicotear con esta guerra, porque a partir de esta guerra, corta de alguna manera el acceso a la ruta de la Seda y lo que ya vemos es el paso de esa China que era de alguna manera de hemisférica a una potencia en muchos aspectos.

El otro día leía, que en el campo de la fuerza naval es mayor que EEUU y ni hablar de lo que es con el conocimiento, la inteligencia artificial, etcétera.
Una China, que por ejemplo, de los 10 bancos más importantes del mundo, cuatro son chinos, son del Estado chino, porque en China la mayoría de las empresas son estatales o mixtas.
Lo mismo estaba diciendo con PBI industrial de China es igual al de los tres países más poderosos del mundo: Alemania, Japón y Estados Unidos. Es para tener una dimensión de lo que pasa.

Entre los grandes cambios que se están produciendo en este momento, por los acuerdos realizados luego de la Segunda Guerra Mundial uno de los triunfos que tiene EEUU, en 1945, para situarnos en el tiempo, era que Keynes, el economista británico, proponía una moneda global que se llamaba “Bancor”. Pero el delegado norteamericano gana la batalla y se dispone que el dólar va a ser la moneda, que en aquel momento era compensada con el oro. Tenía tanto oro el tesoro norteamericano, tantos dólares podía imprimir. Luego, en los 70 deja de ser así y ellos le dan a la maquinita sin problema.

El tema es que, y esto es lo interesante, es que cualquiera de los 200 países de la Tierra para comerciar debemos tener dólares. Si nosotros compramos o vendemos algo a Uruguay no lo podemos hacer si no es con dólares. Y Uruguay tiene que hacer lo mismo. Así que todos los países del mundo deben tener dólares para poder mínimamente tener un comercio básico. Es decir que EEUU tiene el control de todos. Esto es lo que en este momento está cambiando, porque de parte de Asia Pacífico con acuerdos que ya existían, pero con la guerra se aceleró, hay comercio con las monedas nacionales: Rublo, rupia, yen. Han entrado países como Arabia Saudita, que históricamente eran superaliados de EEUU. Han entrado muchos países de Asia, con lo cual ya aparece una brecha y una fisura enorme en relación a este tema.

Volviendo a la región y a casa, la posibilidad de una moneda común, binacional, es vital en ese sentido. Una incorporación a los Brics, es fundamental. Un recaudo de las grandes riquezas que tiene nuestro continente, por los recursos naturales de nuestro territorio, hasta ahora los Estados Unidos lo tenían meramente como reserva. Los tenían ahí, para el caso de que fuera necesario.

Ustedes habrán escuchado a Laura Richardson, la generala del Comando Sur, ella habla de “nuestro litio”, “nuestro petróleo”, “nuestra agua”.

Para concluir, creo que en esto que comentaba Estela Díaz, sobre la disputa en la que nos encontramos, esto es fundamental. El tema de la industrialización para que no muera el trabajo, en contra de la financiarización, que es justamente la gran bandera norteamericana, es fundamental en este período que sucede.

Un gobierno que defienda los recursos naturales, es fundamental para nuestro futuro. Y un gobierno que tenga la visión internacional para darse cuenta de los cambios que están sucediendo, aunque es difícil porque tenemos a la gran potencia muy cerca, en el mismo continente, pero aun así, debemos tener conciencia de la importancia que significa abrir un norte multilateral.

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