Desde la CTA de les Trabajadores saludamos a las familias de los 39 compañeros asesinados por el gobierno de Fernando De la Rúa, durante el levantamiento popular de los días 19 y 20 de diciembre de 2001. Al solidarizarnos, exigimos el juicio y castigo de todos los responsables de esos crímenes y rechazamos la fantochada de la Justicia de imponerles penas decorativas, confirmadas luego por la Cámara de Casación Penal. Reclamamos, también, se disponga un resarcimiento económico a los familiares de los compañeros masacrados.
Aquellas horas de 2001, signadas por la movilización popular en las grandes ciudades y por la feroz represión desatada tras la implantación del Estado de Sitio, significó la derrota más estrepitosa del experimento neoliberal iniciado por la dictadura genocida y continuado por los gobiernos de Menem y por la gestión de la Alianza con De la Rúa a la cabeza.
Sin embargo, los mismos intereses y los personajes siniestros que durante aquellos años se lucieron despojando al pueblo argentino, hoy retornan con sus nuevas recetas de hambre, desestabilización antidemocrática y amenazas protofascistas. La decisión de la Corte Suprema de declarar inconstitucional la reforma del Consejo de la Magistratura; la maniobra opositora de dejar sin Presupuesto Nacional al gobierno; la constante presión del FMI para que nuestro país se rinda a sus exigencias; la aparición de discursos del odio, legalizados en bancas parlamentarias y mesas de redacción de los medios hegemónicos, configuran un panorama de amenazas antipopulares y antidemocráticas que no estamos dispuestos a tolerar.
En este vigésimo aniversario del heroico levantamiento popular de diciembre de 2001, las trabajadoras y los trabajadores de la CTA manifestamos que la MEMORIA SIGUE DE PIE y que, en alerta por estas maniobras desestabilizadoras, no dudaremos en ganar las calles para defender la dignidad de todo el pueblo argentino.
Carlos Girotti Hugo Yasky
Secretario de Comunicación Secretario General