La Plaza Lavalle fue colmada de organizaciones sociales, políticas y sindicales que exigieron romper la proscripción política de Cristina Fernández de Kirchner y ponerle un freno a la persecución judicial contra lxs dirigentes del campo popular, por parte de un sistema judicial que encubre a los empresarios de la derecha.
La Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina marchó desde Avenida de Mayo y 9 de Julio hacia la Corte Suprema de Justicia de la Nación con la consigna “Democracia o Mafia Judicial”. Los curas en Opción por los Pobres Ricardo Carrizo y Francisco ‘Paco’ de Olveira se sumaron a la columna de lxs docentes porteñxs de la Unión de Trabajadores de la Educación, con un cartel que recordaba los recientes días de ayuno de Paco en Tribunales y decía: “Ayunamos por lxs pobrxs contra la mafia judicial. ¡Fuera la Corte Suprema!”.
Junto a los gremios de la CTA marcharon en unidad lxs compañerxs de la Corriente Federal de Trabajadorxs. Desde Avenida 9 de Julio, la nutrida columna dobló hacia Diagonal Norte rumbo a Tribunales, y en breves minutos se dio comienzo al acto central que tuvo cinco oradorxs: Paco de Olveira; nuestro secretario general de la CTA y diputado nacional, Hugo Yasky; Carmen Arias, de la Asociación Madres de Plaza de Mayo; Vanesa Siley, diputada nacional, consejera de la Magistratura de la Nación y secretaria general de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Judiciales (FE-Sitraju - CFT- CGT); y el gobernador bonaerense Axel Kicillof. Detrás, sobre el escenario, acompañó la jornada un amplio arco político: intendentxs, legisladorxs, comunerxs; referentes sindicales, de movimientos sociales y de Derechos Humanos.
Compartimos a continuación las palabras de Hugo Yasky, secretario general de la Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina, diputado nacional y presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados de la Nación:
“Compañeros, compañeras, inmenso orgullo de hablar en esta plaza donde tantas veces estuvimos, pero que nunca estuvo como ahora.
Crece la convocatoria y en esta cantidad enorme de compañeras y compañeros de los sindicatos que integran la CGT, que integran la CTA. Por eso no quiero hablar de manera personal, no como Secretario General de la CTA, quiero hablar como parte de este movimiento obrero que nunca se arrodilló ante los poderosos y hoy con orgullo viene a esta plaza a decir que estamos de pie, que no hay justicia, no hay poder económico, no hay clase patronal, no hay poder dominante que nos vaya a hacer cambiar de opinión.
Sabemos que tenemos muchos problemas, mucho agobio. Hay muchos compañeros y compañeras que no llegan a fin de mes. Así como se garantizan los dólares para que la economía siga funcionando, tenemos que pedirle al gobierno que también garantice los pesos para que en todas las familias del país se llegue dignamente a fin de mes.
También por eso se la persiguió a Cristina, fundamentalmente, por eso se la persiguió a Cristina y se la quiere proscribir.
Porque con la condena de Cristina, que es inocente y lo demostraron con esa causa judicial, con esas 1600 páginas, cuando no tenían una sola prueba. Con la condena a Cristina quieren condenar no a una persona, quieren condenar a un pueblo. La proscripción que quieren para Cristina es la proscripción de la justicia social; la proscripción de la distribución de la riqueza; la proscripción de la defensa de los derechos.
Ayer veía con vergüenza ajena, cómo los candidatos de la oposición desfilaban en la pasarela de la Rural compitiendo a ver quién prometía más ajuste, más hambre, más eliminación del presupuesto para ponerla en las manos de los dueños del capital económico. Y ese espectáculo vergonzoso que piensan que va a ser el que les permita ganar la elección choca contra nuestro pueblo.
Nuestro pueblo hoy está en la calle porque sabe que la justicia corrupta, que la injusticia social, que la persecución y condena a Cristina sin causa; que la persecución y prisión a militantes populares, responden a un mismo objetivo: disciplinar socialmente a este pueblo que desde Perón y Evita nunca supo lo que era traicionar a sus líderes, soltarle la mano.
Por eso no hay que aflojar ni medio milímetro.
Hoy acá, esta luz de este pueblo cambia esta Plaza. Esta plaza y esa Corte necesitan penumbra, silencio, para todos esos fachos que castigaron no solamente a los luchadores sociales, a las Madres del dolor, que castigaron a los trabajadores. Acordémonos cuando en plena pandemia con un fallo judicial que cuando aumentaron los alimentos, porque había un fallo judicial que protegía a las empresas, vino el aumento de las prepagas con otro fallo judicial y después los jueces son retribuidos con viajes, con todos los gastos pagos a Lago Escondido y los llevan, como los llevan los ricos, en esa cunita de oro que le hacen para devolverles favores.
Nosotros queremos un pueblo con educación y trabajo. Un pueblo sin hambre, un pueblo con derechos. Un pueblo con respeto a los derechos humanos y queremos fundamentalmente la libertad para que quien es nuestra líder, pueda ser nuestra candidata a Presidenta.
No queremos que piensen que vamos a agachar la cabeza. Que piensen que nos van a intimidar. Nada. No hay amenazas, ni palabra posible para parar este pueblo.
Y arrancamos en el año 2016, en abril, aquel día de lluvia, todavía de noche, cuando una multitud la sacó a Cristina de Comodoro Py. Y ese día Cristina nos dijo: ‘Hay que construir la salida de la unidad del campo popular. Hay que terminar con la injusticia, construyendo la fuerza política que los derrote’, y esa es la vía que nosotros queremos.
Cristina Kirchner, al frente del movimiento nacional y popular. Cristina Kirchner, tercer mandato de Presidenta, Cristina Kirchner conductora de todos aquellos que luchamos por el lema de Hebe de Bonafini, de Estela Carlotto, Madres de Plaza de Mayo.
Fuerza compañeras, compañeros. Nadie baja los brazos, nadie entrega nada.
Gracias por estar acá. Gracias Padre Paco, gracias movimiento sindical, gracias a los que saben que el pueblo argentino se defiende peleando.
Presidenta, Cristina Presidenta!!!”.