Una comitiva de la Secretaría de Relaciones Internacionales participó del XVº Congreso de la Confederación General de los Trabajadores Portugueses – Intersindical Nacional (CGTP-IN) que tuvo lugar del 22 al 24 de febrero en Seixal, Portugal.
“Grandola, Villa morena
Terra da Fraternidade
O povo é quem mais ordena
Dentro de ti, Ó Cidade.”
Con las voces de un grupo de Cantores do Alentejo, (coros tradicionales populares del norte de Portugal) que entonaron el Himno de la Revolución de los Claveles, se abrió el XVº Congreso de la CGTP-Intersindical. Un emotivo momento cuando están a punto de cumplirse 50 años de la revolución que el 24 de abril de 1974 terminó con la larga dictadura de Antonio de Oliveira Salazar. Esa canción, del más famoso cantor de protesta del país, José “Zeca” Afonso, fue la señal de partida del movimiento de los Capitanes de Abril, jóvenes oficiales del ejército cuya decisión de resistencia y rebelión se forjó durante la brutal y dolorosa Guerra colonial, emprendida por la dictadura contra las luchas independentistas de las colonias portuguesas (Angola, Mozambique, Cabo verde, Guinea-Bissau).
La CGTP-IN, predecesora de la Revolución de los Claveles, ya que se formó en 1970, aún en plena dictadura, no podía dejar de poner a su XVº Congreso bajo la bandera y en memoria de la Revolución que recuperó la democracia para Portugal.
Un Congreso fuertemente marcado por la política no solo nacional, también por el contexto internacional y un congreso de cambios del que surge una nueva dirigencia encabezada por el Compañero Thiago OLIVEIRA, nuevo Secretario General. Un congreso preparado “en la acción sindical y en la lucha” como lo expresó en su intervención al cierre del Congreso.
Un Congreso también marcado por los desafíos que la actual coyuntura impone a la clase trabajadora, y a las organizaciones que la representan. Los efectos de las sucesivas crisis económicas, que Portugal ha vivido de manera muy aguda desde el 2008 y que caminando por sus calles han dejado señales inequívocas del sufrimiento impuesto a las clases populares.
Sobre la situación nacional el Congreso y la nueva dirigencia dejaron tres mensajes:
• Sobre el pasado, la necesidad de rescatar la lucha y la decisión de resistir de los afiliados y afiliadas de la CGTP en los momentos más duros de las sucesivas crisis. Una organización que no dejó de estar presente junto a los trabajadores y trabajadoras, consciente de la necesidad de no abandonar la lucha.
• En el presente, la urgencia de enfrentar el deterioro de las condiciones de vida y de trabajo en el país, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, la creciente precarización de las relaciones laborales, la flexibilización de los procedimientos para el despido, la desregulación arbitraria de los horarios de trabajo, a la ausencia de reales oportunidades para los más jóvenes, el todavía insuficiente reconocimiento del papel de las mujeres en el mundo del trabajo y la subsistencias de salarios injustos y desiguales entre mujeres y hombres.
• En el futuro, ante las próximas elecciones del 10 de marzo, la obligación de votar con conciencia de clase, de votar por quienes defienden los intereses de los y las que trabajan. Votar por la valorización del trabajo y de los trabajadores/as. Por una política en la que no estén ausentes los valores del 24 de abril de 1974.
EL XVº fue precedido por una Conferencia Sindical Internacional el 22 de febrero de 2024, titulada “UNIDAD DE LOS TRABAJADORES/AS EN LA LUCHA POR LOS DERECHOS, LA PAZ Y LA SOLIDARIDAD”.
Un momento de debate y puesta en común de la situación en los países de la numerosa delegación internacional que respondió a la invitación de la combativa central portuguesa. Asistieron delegaciones sindicales de las excolonias portuguesas (Angola, Mozambique, Cabo Verde, Guinea-Bissau) pero también de China, Vietnam, Cuba, Japón, Rumania, Brasil, Uruguay, Italia, Francia, España entre otros.
Durante los debates fueron recordadas y reivindicadas las luchas en Palestina, el largo bloqueo de Cuba, la urgente necesidad de llegar a la Paz en Medio Oriente, de terminar con la guerra a las puertas de Europa.
Se analizó con creciente inquietud el avance de la extrema derecha en Europa y otras regiones del mundo, y lo que eso implica para los trabajadores t trabajadoras. “La extrema derecha, más allá de discursos inflamados, no ha hecho nunca nada y sobre todo nada bueno, por quienes trabajan” una frase repetida a lo largo del debate.
La CTA-T estuvo representada por la compañera Marta Scarpato, quien intervino para denunciar las grave situación que enfrentan los trabajadores y trabajadoras argentinos/as y las violaciones a los derechos laborales y sindicales más elementales, subrayar las acciones de resistencia que se desarrollan (huelgas, paros y movilizaciones) y reclamar la solidaridad de las organizaciones presentes para con las luchas presentes y futuras.
La situación argentina fue recordada por varias de las organizaciones que participaron en el debate para expresar precisamente su total solidaridad.