Discurso de Máximo Kirchner en el cierre del Plenario de la Militancia realizado en el Microestadio de Ferro el sábado 22 de abril de 2023

Máximo Kirchner en Ferro – 22 de abril 2023

Compañeros, compañeras, antes quiero empezar por agradecer a las autoridades del Club Ferro, a los socios y a las socias, que piensen como piensen, nos permiten estar acá, hace un añito atrás estuvo el radicalismo y hoy estamos nosotros y hay un poquito más de alegría compañeras.

Quiero como siempre, primero agradecer a cada uno de ustedes la presencia desde temprano para poder discutir, debatir este sábado hacia dónde entendemos debe marchar no sólo la Ciudad de Buenos Aires, sino también nuestro país.
Las muchas veces denostada, estigmatizada actividad militante, de argentinas y argentinos, ciudadanas y ciudadanos, cualquiera sea la índole de su militancia, cultural, social, sindical, deportiva, política, siempre es destacable que la gente participe, que la gente se sume, que aun un sábado a la mañana, después de una semana de trabajo, de ver poco a la familia, a los hijos, las hijas, ponga su tiempo a disposición de un bien común ante la invitación diaria, que vemos en los medios de comunicación y de la mayoría de las fuerzas políticas a que seamos meros individuos, solos, para ir directamente al matadero.

Una de las respuestas a tanto individualismo, a tanto egoísmo, hoy estamos en este plenario de la militancia que se congregó para poder discutir, debatir y también poder construir un programa, poder empezar a debatir un programa de gobierno, más allá de las plataformas que se preparan para las elecciones creo, que de cara a lo que viene debemos tener un programa claro, que tenga 10, 15, 20 puntos y el compromiso inquebrantable de cada una de las partes del Frente de Todos, de llevarlo adelante definitivamente para después no tener dolores de cabeza.
Creo que esta ciudad, hermosa ciudad de Buenos Aires, también tendrá dentro de unos pocos meses la capacidad de poder ofrecer a sus ciudadanas y ciudadanos una opción superadora de lo que han sido estos últimos 16 años para la ciudad donde ha gobernado siempre la misma fuerza política.

Esta ciudad, muchas veces, como ustedes saben, se ve a lo largo y ancho de la patria, es como un escenario donde cada argentina y argentino, así viva a miles de kilómetros, siente muchas veces, por la penetración mediática, que lo que pasa aquí también sucede a veces en sus pueblos.
Por eso es importante lo que ustedes llevan adelante acá, con dignidad, militancia, creatividad, ante lo que, si el poder de acá, estuviera en el interior de nuestro país, se le llamaría “feudo”, en la Ciudad de Buenos Aires el jefe de Gobierno maneja el Poder Judicial con una mano, con la otra mano maneja los dos diarios más importantes de la Ciudad, Clarín y La Nación+ que hace que el oficialismo todos los días, cuente con mayorías que les permiten hacer y deshacer a su gusto también en la Legislatura porteña.
Una policía más cerca de un trabajo político que de lo que realmente debe hacer, que es cuidar a porteños y porteñas. En esta ciudad cualquiera de estas características humanas, son las que muchas veces sirven para alimentar que en el interior de nuestro país hay feudos y que en la Ciudad de Buenos Aires todo es bonito y democrático. Sumémosle también, si quieren, a que aquí reside el poder económico y financiero de la Argentina que viene trayendo de rodillas a nuestra gente.
Es importantísima la batalla que va a dar este espacio político en la Ciudad de Buenos Aires para seguir creciendo e intentar gobernar y demostrarle al resto del país que las porteñas y porteños no se han olvidado que pertenecen a este país grande, hermoso que necesita ser protegido.

A diferencia también de las provincias argentinas que coparticipan sus recursos con sus municipios, sus comunas, es necesario que la Ciudad de Buenos Aires, realmente, ponga en valor a las comunas y empiece a coparticipar los recursos a cada una de sus comunas, sino muchas veces, y lo sé por mis compañeras y compañeros de los diferentes espacios que integran este espacio en la ciudad, es todo a pulmón y por la voluntad de cada comunero, comunera que trata de llevar mejoras a su gente, prácticamente con nada.

Eso ayudaría también, ya que no es la mirada del jefe de gobierno porteño, a traer más dignidad a los sectores más postergados, olvidados de la Ciudad de Buenos Aires. Ese Sur de la Ciudad de Buenos Aires que viene esperando mayor dignidad, ser visibilizado en la agenda de quienes gobiernan en esta ciudad, porque ese Sur es el que más sufre y tiene los peores números de pobreza. Es el que más sufre y tiene los números más altos de mortalidad infantil. Es también el que tiene la tasa más alta de homicidios de la ciudad y necesita mayor seguridad también, aunque no tengan los ingresos que el jefe de gobierno le da a otros barrios, también en el Sur necesitan seguridad, trabajo, que se cuiden más a sus pibas y pibes.
Esa es la realidad, como le gusta decir al jefe de Gobierno porteño, datos, hechos. Cuando uno observa, incluso ve en estos días, dónde se sufre más el dengue en la Ciudad de Buenos Aires.

Creo que tenemos la oportunidad de construir una ciudad mejor, creo que tenemos la oportunidad de poder volver a que esas mayorías, que se han visto embelesadas por cuestiones estéticas, vuelvan realmente a fijarse en lo que pasa no solamente a cien metros de su puerta, sino lo que pasa dentro de esas casas, miles de porteñas y porteños, cuando la ciudad se administra con tanta desigualdad, con tanto privilegio para algunos y tanto olvido para otros y otras.

Creo, sinceramente, también, que debe ser la misma dirigencia porteña la que entienda que será muy difícil hacerlo. Ganarse el favor mediático significa muchas veces alejarse de los intereses de la gente. Sé del peso que tienen los medios de comunicación en la Ciudad de Buenos Aires, lo que les cuesta batallar día a día para llegar a los vecinos y vecinas. Les pido que tengan toda la voluntad que tuvieron hasta ahora, que dupliquen los esfuerzos, para poder llegar a la mayor cantidad de porteños y porteñas, no solo para elevar la representación en la Ciudad de Buenos Aires, sino también para colaborar con una elección nacional que va a ser necesario que cada porteña, porteño, tenga la voluntad inquebrantable de sumarse a un frente nacional que vuelva a traer dignidad a nuestra gente.

También es cierto que de esta Ciudad han salido los intendentes que se han convertido en presidentes que más daño le han hecho a este país: Fernando de la Rúa, Mauricio Macri.
Hay otro al que se le está complicando un poco, parece que la presidenta del partido lo trae cortito, le tiene miedo.
Lo cierto es que como han gobernado nuestro país y las tragedias que trajeron. Y discúlpenme que me remonte un poco en el tiempo, porque muchas veces primero se dice que nuestras pibas y pibes, los más chicos, están todos en un lugar hablando de libertad. Primero, para aquellos que quieren hablar de libertad les recuerdo un buen tema de La Renga. Eso les va a hacer entender qué significa hablar de la libertad.
Segundo, creo que no es así, que hay muchos pibes y pibas a lo largo del país, y en particular en esta ciudad, que quieren otro destino, que no han perdido la noción de solidaridad, que tienen ganas de participar y que hay que abrirles las puertas en todos los lugares que sea necesario dando la discusión, para que puedan hacer el aporte que muchos de nosotros no pudimos hacer en el 2001 y todo terminó como terminó.
Las fuerzas políticas les deben abrir las puertas a los más jóvenes para que puedan hacerse cargo también de sus propias demandas intergeneracionales, como bien sabemos.

Entendemos este tipo de sucesos, y ante qué nos encontramos en particular de cara al próximo proceso electoral.

Cuando uno mira a Cambiemos, JxC, no sé qué nombre o razón social tendrán para el próximo plan de negocios en el tiempo, me puse a mirar quiénes eran sus candidatos. Y pensé también en quiénes están hoy en esos lugares.
Por ejemplo, hoy, al frente del PAMI tenemos a una gran compañera como Luana Volnovich, que hizo realidad las palabras del Presidente en campaña cuando dijo que iba a haber medicamentos gratis para nuestras jubiladas y jubilados. Cuatro millones de los cinco millones de afiliados hoy tienen acceso a eso. Y es verdad, son aproximadamente, en promedio, 9000, 10000 pesos. Sé que no es suficiente, pero también sé que esos 10 mil pesos que hoy no destinan a sus remedios, los pueden destinar a un poco más de comida en su casa o comprarle un librito de colores a su nieto para que pueda colorear. No es todo, es parte, es un paso.

Quién estaba en el PAMI en época de Fernando de la Rúa, vaya sorpresa, Horacio Rodríguez Larreta, segundo de Cecilia Felgueras, que respondía a instrucciones directas de Antonio De la Rúa, y que nunca más supimos nada de él.
Pero me seguí preguntando más cosas y vi para que vean, cómo es y como cantan ustedes, qué distintos somos, fui a ver dónde estaba Gerardo Morales, el emperador jujeño ...

Olé olé olá Para Milagro la libertad, para Morales el repudio popular Olé olé

Y fui a ver dónde estaba, viceministro de Desarrollo Social de Graciela Fernández Meijide en el gobierno de Fernando de la Rúa y dije: Bueno, ¿dónde están nuestros compañeros hoy? Y me acordé del compañero Cuervo Larroque, y miren qué distintos somos que es el ministro de Desarrollo de la provincia de Buenos Aires.

Seguí pensando y vi que hay una candidata también en Cambiemos, y me fui a ver dónde estaba. Es difícil porque ha pasado por muchos lugares, y era la ministra de Trabajo de Fernando de la Rúa, la ministra de Trabajo para quien la palabra orden, que hoy la pueden ver en los carteles, significaba 13% de recorte para nuestros jubilados y jubiladas, 13% de recorte, que Clarín llamaba poda, para los trabajadores públicos.

Y seguí comparando. Hoy en la provincia de Buenos Aires tenemos al compañero Walter Correa que es un gran ministro de Trabajo que defiende los intereses de los trabajadores y de las trabajadoras. La pregunta que tenemos que hacernos entonces es donde estaban el Negro Correo, el Cuervo, Luana y Wado, cuando esta gente hambreaba al pueblo.
Cuando Larreta, Bullrich y Morales, impunes por los homicidios del 19 y el 20 de diciembre, hambreaban a nuestro pueblo, nuestras compañeras y compañeros estaban en la calle resistiendo junto a una sociedad que no daba más y que los había echado bajo el canto de “que se vayan todos”.

La propuesta moderna, digital, de la derecha argentina, es traer los mismos verdugos del pueblo que hace 20 años no tuvieron empacho en regar las calles de la Argentina de sangre, dolor y miseria.

Sé también que estas situaciones que vemos hacen que nosotros, más allá de señalar esto, debamos construir una propuesta. Que tengamos la inteligencia común suficiente para aprender de los errores para gobernar y dominar nuestras miserias individuales y poder entre nosotros potenciar nuestras virtudes. Cuando en un frente político las miserias conducen a las virtudes, está condenado al fracaso. Deben ser las virtudes las que conduzcan para que nuestra gente pueda mejorar. Nadie está exento de errores o equivocaciones, quien diga que no se equivoca, que no tiene errores, que a veces no tiene un poquito de vanidad, miente, lo que tiene que saber siempre es poder gobernarlo, porque para gobernar a la gente primero hay que aprender a gobernarse uno mismo, para no ser rehén de situaciones que después desembocan en grandes tragedias.

Vemos hoy cómo viene la mano, cómo nos aprietan de afuera, cómo nos pusieron de rodillas.
Miren, hay momentos en que cada persona, compañero, hombre, mujer, tiene que tomar decisiones. En lo personal vengo también a dar cuenta de lo que hice, de lo que no hice y de lo que no supe hacer. Porque es lo que debe hacer un dirigente. No victimizarse, sino hablar con sus compañeros y compañeras militantes.

Cuando llegó el famoso acuerdo del FMI al Congreso argentino, acuerdo extravagante, innecesario generado por la deuda que tomara Mauricio Macri, allá por el 2018, este mes se están cumpliendo cinco años de la mayor desgracia del 2015 a la fecha para la mayoría de los argentinos y argentinas.

Quienes estamos acá sabemos muy bien de qué se trata el FMI, porque fue el espacio político que lo sacó de la Argentina, que puso en valor el sacrificio de la gente. Las ciudadanas y ciudadanos argentinos ven peregrinar por los medios de comunicación dirigentes que piden sacrificios. Obviamente que va a haber que hacer un sacrificio inmenso para sacar nuestro país adelante, el punto es cuando un dirigente lo pone en valor.

Hubo un Presidente en la Argentina que tomó la decisión de poner en valor el esfuerzo de cada argentino y argentina y allá por diciembre de 2005 poder decirle que se había acabado el tutelaje sobre la Casa Rosada y que las cosas que votaba la gente, los presidentes que ponía la gente en la Casa Rosada ahora gobernaban para los argentinos y argentinas, lejos de los intereses de los organismos multilaterales de crédito que terminan siendo grandes custodios, patovicas, de capitales que vienen a esquilmar nuestro país.
Recuerdo que allá por el 2005 había grandes críticas, imagínense, la pobreza estaba en 35, 38 puntos o más, la desocupación en 14, y hubo que destinar 9800 millones de dólares para sacar al FMI de la Argentina.

Nuestra gente sufría mucho también ahí. A veces las decisiones se toman así pero con la convicción plena que iba a suceder lo que finalmente sucedió. Que desde el 2005 al 2015 hubo un período inédito de crecimiento en la Argentina y fue precisamente porque las políticas económicas, culturales, sociales, hasta las políticas deportivas se definían en nuestro país mirando y pensando en las necesidades de un pueblo que había sido invisibilizado y olvidado durante mucho tiempo.

Néstor no se murió, Néstor vive en el pueblo lpm que lo parió

Es ahí donde realmente reside la capacidad de las dirigencias, de mejorar días tras día, paulatinamente la calidad de vida de los argentinos y argentinas. Imagino un comerciante de esta zona de Caballito, que los hay muchos, allá por el 2004, llegando justito a fin de mes, pagando sus impuestos y también viendo cómo después ese gobierno colaboraba con su sacrificio y cancelaba la deuda con el FMI. Y también de esos argentinos y argentinas que aún no encontraban trabajo y gracias a eliminar el tutelaje foráneo pudieron empezar a tener más oportunidades.
De eso se trata gobernar, de generar la mayor cantidad de oportunidades para que cada argentina y argentino después sí pueda desplegar su talento, su voluntad, sus dones, su contracción al trabajo.

Porque en ese momento, y lo hablé muchísimo con compañeros y compañeras, decidí dar un paso al costado de la orientación del bloque de la Cámara de Diputados, mas no abandonar el bloque, me quedé adentro del Frente de Todos, solamente fui consecuente con lo que tiene que ser esa tarea. Y lo hice con la mayor de las honestidades políticas e intelectuales. No fue un mero posicionamiento personal. No fue cuidar un legado que se cuida por sí solo como pueden ver los argentinos y las argentinas. Fue entender que ese acuerdo iba a tener las consecuencias que está teniendo. Fue un acuerdo que a 15 días de iniciada la guerra que rebotó con todos los precios de la energía y los comodities disparados. Un acuerdo incumplible y que sólo esta sequía ha acelerado las consecuencias.

Porque este FMI que financió la campaña de Macri, con 45 mil millones de dólares, le prestó, según el mismo Macri, la plata a la Argentina porque había una sequía.
Por ejemplo, si prestó esa plata en ese momento por una sequía, que me pregunten cómo podemos hacer para devolverla con una que genera 10 millones de toneladas menos de las que tenía Macri, por ejemplo.

Son números. Si quieren decir que es una cuestión ideológica, está bien, no tengo problemas. Tengo ideas, tengo un conjunto de ideas, de eso se trata la actividad política, de proponer.
¿En qué momento tener un conjunto de ideas se ha transformado en un pecado? No un pragmatismo sin resultados que nada le trae a la Argentina. Las acciones políticas pragmáticas sin resultado también son ideología y son ideología de la mala, de la peor, de la que hambrea, de la que excluye y de la que termina reprimiendo para poder seguir en el Poder. Esa es la verdadera historia de nuestro país.

Porque aparte, el ex ministro de Economía, Guzmán, mientras discutíamos el carácter que iban teniendo las negociaciones, me decía: “Máximo, Giorgeva, (era increíble) Giorgeva es una mujer que en su infancia sufrió mucho en Bulgaria, que tiene un gran sentido social, una gran empatía con lo que le pasa a los pueblos”.

Le pido a la Sra. Giorgeva del FMI que si Guzmán no me mintió, que no tenga tanta perversidad de aplicarle a 45 millones de argentinos lo que ella sufrió de pequeña. Está en ese lugar y realmente puede cambiar el curso de la historia de un gran país como la Argentina. Un pueblo de trabajo, de paz, un pueblo que le ha dado talentos a todo el mundo. No merece ese trato nuestro país y ninguna nación del mundo.
Porque tenemos que recuperar y saber también que la dignidad se reclama y se ejerce, al igual que los derechos
Si el pueblo argentino solo reclama y no ejerce sus derechos, si solo reclama y no ejerce su dignidad, solamente estará verbalizando aquello que quiere, pero no internalizando para poner el cuerpo, el corazón y la mente en realmente querer generar una salida superadora a esta crisis que afrontamos.

Alguno dirá: no está hablando de futuro. Vieron que siempre cuando uno está discutiendo te dicen: pero hay que hablar de futuro.

Cristina Presidentaaaa!!!

Les voy a hablar un poco de uno de los futuros más difíciles que tenemos por delante. Los vencimientos que tenemos como país para adelante. Y es importante, necesario que lo sepan, para que ningún candidato de nuestro espacio, ningún candidato de otra fuerza política lo olvide en cuanto a qué hay que proponer y cómo debemos hacerlo en la Argentina.

2024 15 mil millones de dólares de vencimiento
2025 otros 18 mil millones de dólares
2026 16 mil, 24 mil

Ese es el futuro de la Argentina también, guste más o guste menos. Esa es la realidad y las realidades no se niegan, se afrontan, se transforman.

Hace días que veo desfiles de gente, por ejemplo, que a los carnavales porteños le sacan ayuda pero se va a tratar de juntar votos en los carnavales en el interior del país, que me parece muy bien que ayude a los carnavales del interior. Pero también que ayude a las compañeras y compañeros que por febrero y marzo llevan tanta alegría y también le dan un lugar a nuestros pibes y nuestras pibas para poder estar con las vecinos y vecinas de los barrios de la Ciudad de Buenos Aires.

Lo real que eso es parte de nuestro futuro. Es parte de lo que la dirigencia argentina, por falta de coraje, o directamente por traición ha terminado generando a partir del 2015 en nuestra patria. Les pido que estemos realmente atentos a esto que nos pasa.

Desde 2015 para acá, Macri se convirtió en el primer presidente argentino en no poder ser reelegido en una elección.
A pesar de más de 60 mil millones de dólares de los acreedores privados; a pesar que integrantes del propio FMI reconocieran que le habían dado la plata para que ganara la elección, y que los propios integrantes del macrismo dicen que había sido para eso; a pesar de la escolta mediática, con la que suelen caminar los dirigentes de los espacios que no pertenecen al pueblo; a pesar de contar con un Poder Judicial que iba eliminando a quienes podían enfrentarlo, no pudo ganar la elección.

Quienes hicimos todo durante el 2016 al 2019, resistiendo al macrismo en cada calle, en cada puesto de trabajo, en cada banca del Congreso, en cada provincia, en cada pueblo, pusimos todo lo que teníamos arriba de la mesa para que el Frente de Todos se pudiera constituir. Fui y fuimos a buscar a cada dirigente, y más allá de las aseveraciones y los comportamientos que habían tenido al respecto, no solo de la vicepresidenta, sino de un montón de compañeros y compañeras, para poder generar en la Argentina una acción superadora a un gobierno de esa calaña.
Todo lo dejamos, todo lo dimos, todo lo pusimos arriba de la mesa. No hay derecho a que alguien esté enojado y hoy no ayude a construir una nueva opción. Si hubo errores durante estos tres años está bien, es bueno reconocerlo, pero realmente es muy complejo y difíci9l, si cada sector que integra el FdT, todo el día está queriendo poner en duda su aporte, por un lugar más o por un lugar menos en las listas.

Creo formal y fríamente, que ayer las fotos no tienen nada que ver con lo que está pasando con nuestra gente. No hacen falta los acting, hace falta reconocer los errores que se cometieron, sentarse a dialogar, hablar, discutir, elaborar un programa y juntar los votos para así ejecutarlo, y así mejorar la calidad de vida de la gente. De eso se trata.

Aparte, nuestra clase media debe estar más atenta que nunca, alejarse un poco de esos medios de comunicación que la vuelven egoísta, la llenan de miedo y acercarse un poco más a su gente, a sus vecinas y vecinos.
Si ustedes miran, y estamos en un club como es Ferro, un emblema de la clase media de los 80, de los 70, en la Argentina. Un club, que, me permito esto, digo, este gimnasio, digo, a Scola, donde jugó Miguel Cortijo, de donde salió un maestro del básquet, buenos deportistas, buena gente, que la ciudad de Buenos Aires, en el caso de Cortijo santiagueño, le ha dado al país.

Esta tapa del diario Clarín, de hace unos meses atrás, dice: “El achicamiento de la clase media por la crisis, ya es el más grave en 18 años”. Mientras la clase media se achicó, ¿quién creció?, ¿quién se quedó con Telecom? Entonces le recomiendo a la clase media, cuando va a pagar la factura de Fibertel, de Personal, de Telecom, y se queja de la dirigencia política, empiece a mirar un poquito mejor quiénes se están quedando con la parte que le corresponde a millones de argentinas y argentinos. Sino da todo lo mismo, y no es todo lo mismo.

Tomala vos, dámela a mí, el que no salta es de Clarín

Porque estas cosas, muchas veces son las que no se entienden. El Estado argentino, durante la pandemia puso las ATP, que era poner plata a los empresarios argentinos para que no tuvieran excusa para despedir trabajadores y trabajadoras, para que no se rompiera ese vínculo entre la patronal y el laburante, que tanto daño había hecho en nuestro país.

Mirando un poco en retrospectiva y viendo el comportamiento que están teniendo esos empresarios que remarcan precios todos los días, quizá hubiéramos tenido que haber hecho que la devuelvan.
Porque esa plata que el Estado les dio es la que hoy presiona sobre el dólar liq, que es lo que brindó el Estado para cuidar a los trabajadores y a las trabajadoras, y se usa ahora para castigar a este pueblo.

También, fueron las mismas trabajadoras y y trabajadores que aceptaron no cobrar la totalidad de sus salarios para colaborar, con una inteligencia muy grande, con esos mismos empresarios que hoy azuzan los precios y quieren quebrar la voluntad de un pueblo. Son los mismos que iban a la Casa Rosada y peregrinaban por cuanto Ministerio había durante la pandemia para conseguir plata y ahora van al Llao Llao a decir que quieren las soluciones.
La hipocresía de los sectores del poder económico en la Argentina deben tener una gran respuesta ciudadana de los argentinos y las argentinas. No podemos dejar que nos sigan llevando por delante de la manera que lo están haciendo.

Si la dirigencia no se anima nos animamos los militantes y las militantes, y la dirigencia que haga lo que quiera, compañeras y compañeros.

Aparte, unas compañeras y compañeros a quienes les pregunté cómo venimos trabajando en la Ciudad de Buenos Aires. Me pasaron lo que se está haciendo en playas ferroviarias, por ejemplo, hubo uno que me llamó la atención. Dice: Recuperación de parcelas tomadas por las torres de Caputto. Eso sirvió para hacer un espacio verde de 2500m2 acá en Caballito, para que las vecinas y vecinos, voten a Larreta o no lo voten, puedan ir a tomar unos mates cuando así lo deseen.

Y me acordé de Caputto y me acordé de lo que le pasó a Cristina. Y me acordé de Revolución Federal. Y me acordé de las cosas que pasan en nuestro país, más allá del trajín, del yugo diario de cada argentino y argentina que la pelean para llegar a fin de mes. Pero esa pelea, que muchas veces le quieren presentar disociada, la suya, la de pelear en su trabajo, la de tratar que no lo exploten, tiene que ver en cómo accionan estos grupos después.

Es increíble que cuando transcurra el momento entre las Paso y las generales en septiembre, se habrá cumplido un año de un atentado sobre quien fuera dos veces Presidenta de la Argentina y actual Vicepresidenta, sin que el Poder Judicial pueda decirnos qué ha pasado.

Resulta que aquellos que decían que había que actuar de la misma forma que actuaron esa noche de manera artera y cobarde, ahí en Juncal y Uruguay, en la Ciudad, los mismos que decían que había que infiltrarse, cantar la marchita, terminaron teniendo negocios con este Grupo Caputo, que aquí en Caballito conocen muy bien, por 13 millones de pesos, que primero decían que era por alquiler, después por mesitas de luz, y finalmente por nada.

Esa es la Argentina en la que vivimos, en la que estamos. Esto es lo que está sucediendo hoy. No es gracioso y es más bien muy triste. Porque en la Argentina tenemos después de la tragedia, el genocidio, que generó la dictadura en la Argentina, si algo siempre hemos hecho como espacio político, como partido político que más desaparecidos se llevó la dictadura es tener una cultura política democrática que realmente represente los intereses de la gente y que pueda dar los debates y las discusiones lejos de la violencia.
Pero estos hechos, impunes, estos lazos entre los grupos de poder económico y grupos de ultraderecha, tienen que ver también con lo que ha terminado sucediendo.

Desde que tengo memoria en este espacio político, la birome siempre la han tenido los militantes y las militantes. El problema que tenemos hoy es que las biromes quieren escribir un nombre y el Poder Judicial saca la birome para escribir el nombre que quieren tener en esta elección. Que nadie se pase de vivo acá.

Cristina Presidentaaaaa

De cara a lo que viene debemos tener una mirada integral sobre nuestro país, animarnos a dar la pelea, tenemos que preservar nuestros bienes naturales comunes, y que la explotación de nuestras materias primas puedan tener valor agregado en nuestro país y se paguen por el valor que deben pagarse y no como desde la época de Potosí hasta acá esquilmen a los pueblos latinoamericanos, al argentino, para abastecer las factorías de allá.

La Argentina hoy, nuestro país, tiene 40 puntos de pobreza con 6 puntos de desocupación. ¿Saben qué significa eso? Que tenemos compañeros y compañeras con salario en blanco que están siendo explotados y explotadas en sus lugares de trabajo.

Hay que dar vuelta la taba. Paritaria, suma fija, o doble aguinaldo, pero hay que encarar el presente, y realmente poner los recursos en nuestra gente, y no en los mismos empresarios que después extorsionan para llevarse la plata afuera y rompen el mercado cambiario argentino. Esa es la verdad.

Cuando uno ve empresas de litio en el norte argentino, cuyos controlantes afuera son Black Rock, el mismo que se aprovecha de nuestro litio, es el que hoy tiene gran parte de la deuda argentina y que fue socio estratégico de quién, para no olvidarnos de Caputo, Morel, del “Messi de las financias”, Toto Caputo.

Realmente la que ponen en los medios, o lo que le hacen ganar a esos tipos para que te digan que sos el Messi de las finanzas, con el desastre que hiciste en un país es llamativo, tan llamativo, como la pauta que pone la Ciudad de Buenos Aires en todo el país. Miles y miles de millones de pesos para que su candidato no pueda superar aún a una persona que confunde deflación, inflación, que no sabe cómo funciona la economía. Miren la mediocridad que hay en la Argentina.

Miren aquellos que señalan con el dedo a nuestras pibas y pibes más humildes, que critican a la salud y a la educación pública. Si el jefe de gobierno, que tanto se preocupa por la educación piensa que el ser humano se unió para derrotar al dinosaurio, y después también piensa que el gas de Bolivia viene en barcos.

Le pido a la derecha argentina que abandone la escuela privada y vuelva a la escuela pública, donde realmente, va a poder, por lo menos, no cometer esos errores.

Estigmatizan, dañan, denigran y después hay muchos que luego van y ejercen esa estigmatización y denigración con violencia. Principalmente siempre vemos cómo muchas veces las personas que tenemos en situación de calle sufren la violencia de otras personas, o de las fuerzas de seguridad. O también vemos cómo a nuestros pibes y pibas los maltratan en un montón de lugares.
Necesitamos construir una sociedad más justa, con mayor grado de empatía, que realmente tenga en cuenta los desafíos que tenemos por delante.

Este partido político que gobierna la Ciudad de Buenos Aires, ahora dice que hay un gasoducto que va a traer milagros en la Argentina. Yo les quiero contar a mis compatriotas que no. No habrá oleoducto, ni gasoducto, ni nada que traiga un milagro a la Argentina si los recursos del Estado no son administrados de la manera correcta y los intereses de la gente defendidos hasta el último suspiro, porque como dije en Avellaneda, me tocó ser muy pibe cuando decían que Loma la Lata era la salvación de la Argentina, allá en Neuquén, y fue parte del milagro, pero del milagro de Chile. No hubo ningún milagro en nuestro país.

Esa fuerza política votó en contra de la recuperación y nacionalización de YPF. Allí donde está Vaca Muerta.
Y ahora es la misma fuerza política que votó en contra del aporte solidario, proyecto que hicimos con cada diputado y diputada de la Cámara y que incluía para que los que más tenemos, en una época dura, aportáramos en la Argentina, y parte de esa recaudación fue también para financiar el gasoducto que va a poner en valor y primero va a llevar gas a argentinos y argentinas.
Segundo, ser factor para elevar la competencia de nuestro sector industrial y recién, una vez que los argentinos y las argentinas en sus casas o en sus industrias, hayan hecho uso de ese gas, pensar en la faz exportadora.

Miren, 2020, 2021, 2022, el saldo de exportaciones e importaciones, ha sido absolutamente favorable a la Argentina. Más de 25 mil o 30 mil millones de dólares. Las reservas son las mismas que en el 2019.
Gran parte del trabajo argentino se ha ido para financiar la deuda que tomaron los mismos de la ATP, de Telecom, para pagar las deudas que las empresas privadas contrajeron en el exterior durante el gobierno macrista.

Estas son las cosas que la compañera Cristina fue marcándonos, no con el diario del lunes, sino con el diario del día.
Maldigo hoy todavía que no haya sido escuchada. No por ella, sino por mi gente que la está pasando mal. No eran posicionamientos de poder. Queríamos que a nuestro gobierno le fuera mejor. Esa fue nuestra intención. Y aun con las críticas que saben tenemos, nunca voy a dejar de reconocer que fue mucho mejor para mi Argentina que en la pandemia estuviera Alberto que Mauricio Macri. No especulo, no juego a la política. Queremos que a nuestra Patria le vaya bien. Mucho ha pasado en nuestro país para seguir jugando a la politiquería barata y al toma y daca.

Les pido no solo este año, sino los que vienen que no aflojen, no se desilusionen, que si algo no nos sale bien, no es porque no estemos pensando en la gente, sino porque a veces no todo sale como queremos.

Ayúdennos a equivocarnos menos, participen más. Corrijan y mejoren el margen de error de la dirigencia. Si ustedes se meten en todos los lugares nos vamos a equivocar menos. No es hora de replegarse sobre la bronca. Si alguien tiene bronca acá hay un espacio político que lo puede traducir en energía, en trabajo, en calidad de vida, en poder adquisitivo, en desarrollo tecnológico de nuestra industria. Poner en valor a tantas argentinas y argentinos que todos los días se levantan temprano, se toman un bondi, se toman un tren, dan vueltas por la vida mientras nosotros parece, que no queremos discutir lo que hay que discutir porque nos da miedo enfrentar a los poderes.

No hay que tener miedo, hay que tener coraje, voluntad. Hay que participar. Es hora que todas y todos salgan a convocar.

Quiero ir concluyendo con este tema de la libertad. Quiero decirles a las personas que creen en esos postulados que en el Océano nada prohíbe al krill comerse a la ballena. Pero siempre es la ballena que se come al krill. Si se miran al espejo y no son una ballena, por favor tengan cuidado con el tema de la libertad. El Estado tiene que estar presente allí donde el mercado excluye. Lo aprendimos hace muchísimos años. No debemos olvidarlo. Debemos ver el presente.

Este 27 de abril les pido se acerquen al teatro Argentino de La Plata a acompañar a Cristina. Den el presente. Sean felices. Peleen, trabajen, generen, estudien, crean, denlo todo porque quienes estamos acá daremos todo.
Compañeras, compañeros, las quiero y los quiero mucho.
Hasta siempre, nos estamos viendo y como siempre a vuestras órdenes. Muchas gracias por esta enorme asamblea de militancia popular.
Generen, creen y den el presente.

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