Desde la CTA de los trabajadores y las trabajadoras repudiamos la intervención de la Corte Suprema en el proceso democrático de las provincias de San Juan y Tucumán, ya que es un hecho gravísimo que constituye un claro acto de desestabilización.
Esta misma Corte, que duerme causas durante años, es la que ahora elige con clara intencionalidad político partidaria dos provincias para suspender la elección.
Mientras la Comisión de Juicio Político evalúa su posible mal desempeño, reuniendo pruebas y testimonios que incriminan a sus integrantes, los investigados dan un golpe a la democracia a prácticamente cinco días de los comicios impidiendo en los hechos la posibilidad de que las ciudadanas y ciudadanos ejerzan su derecho al voto.
Lo hace sugestivamente unas horas después de que Mauricio Macri despreciara los resultados electorales de tres provincias argentinas a las que calificó de “poco representativas” y de “feudos”. Luego, la presidenta y precandidata del PRO, Patricia Bullrich en un verdadero sincericidio se hizo cargo de la decisión de la Corte empleando el “nosotros” involucrando como parte de una misma cosa a los miembros de la Corte y a la fuerza política que ella preside.
Esta intromisión, además de desestabilizar, amenaza con la posibilidad de interferir en el proceso electoral a nivel nacional. Ya han puesto en marcha un proceso para proscribir a Cristina Fernández de Kirchner. Ahora le suman este gesto mafioso porque saben que avanzan investigaciones sobre su desempeño y necesitan amedrentar a los representantes políticos que no aceptan las imposiciones del poder fáctico.
Desde esta central respaldaremos todas las iniciativas que adopten nuestras organizaciones de San Juan y Tucumán para, junto a sus comprovincianos, llevar adelante el proceso electoral y no dejar que cuatro personas sin autoridad moral les arrebaten su derecho al voto.
Enrique Rositto, Secretario de Comunicación
Hugo Yasky, Secretario General